Finalmente, solo había un móvil más infectado por Pegasus en el actual Gabinete de Pedro Sánchez, el de Fernando Grande-Marlaska. El Centro Criptológico Nacional (CCN), tras revisar los terminales de todos los miembros del Ejecutivo, ha podido acreditar que solo el dispositivo del responsable de Interior había sufrido la agresión del programa israelí, al igual que había ocurrido con los celulares de Sánchez y de la ministra de Defensa, Margarita Robles. Marlaska sufrió el ataque en junio de 2021, como le ocurrió a la jefa de los Ejércitos. Además, hubo un intento "fallido" de infección del móvil del titular de Agricultura, Luis Planas, también en junio del año pasado. El resto de teléfonos "no tiene rastros" de Pegasus, y a día de hoy los dispositivos de todo el Gabinete están limpios del 'malware' israelí.

El Gobierno daba así cuenta este martes, tras la reunión ordinaria del Consejo de Ministros, del resultado del análisis pericial de los teléfonos de todos los ministros realizado por el Centro Criptológico Nacional (CCN), organismo dependiente del Centro Nacional de Inteligencia (CNI). Precisamente ese informe es el que sirvió de base al Ejecutivo para proceder a la destitución de la directora de los servicios secretos, Paz Estebancese que también aprobó el Consejo de Ministros y que estaba ya cantado desde hace una semana, cuando el titular de la Presidencia, Félix Bolaños, y la portavoz, Isabel Rodríguez, dieron a conocer que los terminales de Sánchez y Robles habían sido infectados con el 'software' israelí Pegasus.

La nueva información del CCN se llevará a la Justicia: se ampliará la denuncia presentada en la Audiencia

Marlaska sufrió dos intrusiones en junio de 2021, en las que se le sustrajeron 400 megas de datos primero y 6,3 gigas después. La información del CCN, señaló Rodríguez este martes, se pondrá a disposición de la Justicia para "ampliar la denuncia" ya presentada el pasado 2 de mayo, cuando se llevó a la Audiencia Nacional las agresiones a los móviles de Sánchez y Robles.

¿Es Marruecos?

La portavoz no quiso especular sobre la autoría de los pinchazos, aunque las fechas y los objetivos no hacen más que apuntalar la hipótesis de que los ordenara Marruecos. Planas fue embajador en Rabat entre 2004 y 2010, y siempre se ha situado más cerca de los planes del reino alauí para el Sáhara, apostando por la vía autonomista, la que el pasado marzo abrazó el propio Sánchez y la que provocó la ruptura con Argelia y el rechazo del Congreso.

Rodríguez insistió este martes en que el juez instructor de la Audiencia Nacional de este caso, José Luis Calama, declaró secretas las pesquisas la semana pasada, así que el Ejecutivo, a partir de ahora, solo se manifestará sobre "hechos constatados y fehacientes". La ministra defendió que el Ejecutivo actúa con "absoluta transparencia" y no tiene "nada que ocultar".