El candidato de Unidas Podemos a las elecciones de Castilla y León, Pablo Fernández, ha prometido impulsar una legislación para impedir las macrogranjas si gobierna y está convencido de que el presidente regional, el popular Alfonso Fernández Mañueco, tiene planes de gobernar con Vox si le dan los números.

"Mañueco vendería su alma al diablo con tal de ser presidente. Estoy seguro de que sería capaz de pactar un gobierno de coalición con la extrema derecha", ha subrayado en una entrevista con Europa Press.

Es más, ha acusado al candidato popular de que a "esa pátina que quiere darse de moderado", pactaría con Vox de "buena gana" porque es una "persona muy cercana a la ultraderecha". De esta forma, ha recalcado que esa posible alianza, de la que "no alberga ninguna duda", sería "una de las peores noticias" para Castilla y León al provocar una "enorme involución en derechos y libertades" en la comunidad.

Sin embargo, ha proclamado que salen con "toda la determinación y ganas" en estos comicios para evitar ese pacto y desalojar al PP tras 35 años al frente del Ejecutivo regional, que se han traducido en "despoblación, precariedad, deterioro de los servicios públicos y exilio".

Un Gobierno progresista

Fernández ha reivindicado que Castilla y León es "perentorio" un cambio que solo puede proporcionar un Gobierno "progresista", que aporte un "giro copernicano" a las políticas de Mañueco. A su juicio, eso solo puede venir de la reedición a nivel autonómico de la coalición estatal, es decir, de un Ejecutivo de Unidas Podemos y PSOE.

Y se muestra esperanzado porque augura que los números sí pueden dar y augura que su espacio político será "determinante" y "esencial" para gestar una alternativa, dado que la confluencia de Podemos, IU y Alianza Verde va a permitirles "multiplicar" sus resultados.

Alerta de "candidaturas en B"

Cuestionado sobre su opinión sobre Ciudadanos (Cs) y si piensa que podría desmarcarse del PP, el candidato de Unidas Podemos ha dicho que la formación naranja está en "franco retroceso" de cara a su "desaparición", por lo que no serán clave en la conformación del Ejecutivo resultante tras los comicios.

No obstante, tampoco alberga dudas de que querrían seguir "apuntalando al PP en vez de fomentar un cambio de Gobierno", pues su propio candidato, el exvicepresidente autonómico Francisco Igea, ya ha dicho que no apoyaría a Mañueco pero ven "con buenos ojos" reeditar un pacto con los populares.

En cuanto a las nuevas plataformas de la denominada 'España vaciada', el también coportavoz estatal de la formación morada ha dicho que ven "con respeto" este movimiento pero sí ha querido hacer un "distingo", dado que han salido muchas marcas "al calor" de este fenómeno.

Por ejemplo, ha diferenciado entre colectivos de "dilatada singladura" defendiendo sus territorios y dan ahora el salto a la política, como es el caso de 'Soria ¡Ya!, de otras que son "plataformas en b" de otras formaciones, como ocurre en Valladolid con una lista que presenta multitud de excargos de Cs y que están "basadas en el oportunismo".

Macrogranjas

Fernández también ha criticado el "bulo" generado por la "derecha y la industria de las macrogranjas" sobre "lo que no dijo" el ministro de Consumo, Alberto Garzón, durante una entrevista al diario The Guardian, donde defendió la ganadería extensiva.

Una tergiversación "torticera" y "deleznable" que, sin embargo, ha propiciado un debate "interesante" sobre el modelo de cada partido sobre el sector primario, en el que Unidas Podemos ha dejado muy carlo su apuesta por la ganadería extensiva y las explotaciones pequeñas y medianas, dado que son las "fijan población" y generan empleo.

En contraposición aparece el PP y su apoyo a las macrogranjas" que producen una "enorme contaminación" y motivan el cierre de las explotaciones familiares, con un modelo "pernicioso" que ha motivado la extinción de más de 10.000 instalaciones ganaderas.

Por tanto, ha defendido que en Castilla y León debe aplicarse primero una "moratoria" de macrogranjas para frenar su implantación en la comunidad, a las que el PP ha puesto la "alfombra roja", y ha apuntado que para el futuro le gustaría una legislación que hiciera a Castilla y León "territorio libre de macrogranjas". "Habría que prohibirlas", ha remachado.

Más ferrocarril

Otro de sus ejes es combatir la despoblación, un hecho "palmario" en la región, y proponen un paquete integral de medidas como "robustecer" los servicios públicos, sobre todo en el mundo rural, y transformar el modelo productivo, que ahora con el PP es "insostenible e insuficiente". La alternativa, según Fernández, es el desarrollo de la I+D+i y aprovechar el "enorme potencial" de recursos y patrimonio de Castilla y León.

Para el área de transportes, el candidato de Unidas Podemos aspira a potenciar el ferrocarril convencional para "vertebrar" la comunidad, dado que ahora muchas localidades están "incomunicadas", y compromete un mapeo para adecuar la red de carreteras, sobre todo las secundarias que ahora muchas presentan un estado "deplorable".