José Manuel Villarejo detonó la guerra sucia que se vivió en 2011 en el Gobierno de Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid entre el exconsejero de Presidencia Francisco Granados y el exvicepresidente Ignacio González. Según consta en una de las agendas que localizó la Fiscalía Anticorrupción el pasado 23 de octubre durante el segundo registro de la vivienda del comisario jubilado en Boadilla del Monte (Madrid), el 4 de julio de 2011, a las que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, diecisiete días después de que Aguirre le destituyera de su Ejecutivo autonómico Granados alertó al ex mando policial de las supuestas actividades corruptas que habría desarrollado su entonces rival Ignacio González.

Y siete días después de esta reunión, el 11 de julio, Villarejo redactó una de sus habituales notas informativas, sin membrete de la Policía, en la que señalaba al entonces vicepresidente del Gobierno madrileño como el receptor de una comisión de dos millones de euros a cambio de la adjudicación de una obra en el municipio de Arganda del Rey (Madrid).

25 millones de euros

En la operación de Arganda el presunto cabecilla de la ‘Gürtel’, Francisco Correa, consiguió una mordida de 25 millones de euros en el considerado como mayor pelotazo de esta trama corrupta destapada tras la denuncia interpuesta por el exconcejal del PP José Luis Peñas y el abogado Ángel Galindo.

En la agenda, una de las dos que Villarejo utilizó en 2011, se pueden leer explicaciones de cada uno de los hechos. Desde la destitución de Francisco Granados, a quien identifica como "Paco GRAN", por su número de teléfono o simplemente "GRAN". Y en el apunte de 11 de julio de 2011, de forma literal, escribió: “GRAN: dice que Nacho [Ignacio González] le ordenó la operación con FM”. Precisamente, el promotor de las viviendas de Arganda del Rey fue el constructor Fernando Martín, el dueño de Martinsa, quien habría obtenido unas plusvalías de 198 millones gracias a las modificaciones urbanísticas aprobadas por la Comunidad de Madrid, según la acusación de la Fiscalía Anticorrupción.

Y después se reseña que “Nacho viajó a Colombia con personal de FM, con Ildefonso de Miguel (El Canal)”. Tal y como se puede ver en un vídeo que fue publicado en la Cadena Ser, Ignacio González acudió al país sudamericano junto a exdirectivos de Martinsa.

"Uno o dos áticos"

En la agenda Villarejo escribió que Ignacio González “tiene uno o dos áticos unidos en La Alhambra del Golf, Guadalmina, controlados con un alquiler con opción a compra pactado con el anterior dueño. Se compró muebles muy especiales”.

El comisario se refiere después al primer dueño del ático, Pedro Javier Villate, quien vendió el inmueble a la empresa Coast Investors LLC radicada en Delaware (EEUU). Esta firma estaba representada por el fiduciario Rudy Valner, quien fue asesor de la empresa Video Mercury, propiedad del presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo. Este empresario mexicano fue quien alquiló la vivienda a la mujer del entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Lourdes Cavero.

Villarejo incluyó todos esos datos en la mencionada nota informativa "discreta" de 11 de julio en la que ya apuntaba que el ático estaba vinculado a la adjudicación de Arganda: “Podría estar relacionado con los aproximados 15 millones de euros detectados como pago de Fernando Martín a Correa, quien a su vez habría sobornado a Ginés López y a Benjamín Martín, siendo Ignacio González quien habría salido mejor parado al percibir dos millones de euros, según la confidencia recibida”, dice el documento, cuya fuente informativa era, según revela la agenda, Francisco Granados.

También anotó que el entonces vicepresidente madrileño habría cobrado comisiones de una constructora, identificando los nombres de los directivos que protagonizaron la operación. La Justicia no ha encontrado hasta el momento ningún vínculo del 'caso Arganda' con el alquiler y la posterior compra del ático de Ignacio González. La investigación que llevó a cabo un Juzgado de Estepona acabó archivada.

Alhambra del Golf

Pero la participación de Granados en la investigación sobre Ignacio González no finalizó con la denuncia inicial, tal y como relatan las agendas. El 6 de julio de 2011, tan solo dos días después de la primera reunión, el ex secretario general del PP madrileño aportó más datos del ‘caso del ático de González’, siempre según las anotaciones de la libreta: “Urbanización Alhambra del Golf, fase III, bloque II, ático 11. A nombre de sociedad panameña. Vendedora Marisa Berri (inmobiliaria). La que está en el Centro Comercial Guadalmina”.

De nuevo, en otra nota informativa, esta de 30 de noviembre de 2011, a la que ha tenido acceso EL PERIÓDICO DE ESPAÑA, Villarejo plasma los datos suministrados por Francisco Granados sobre la venta del inmueble y sobre las investigaciones realizadas de una forma “discreta y reservada”.

“Todas estas gestiones han avanzado en la línea de constatar todas las informaciones recibidas en su momento. Según dichas informaciones, para esta operación de ‘aparente venta’; se empleó una inmobiliaria del mismo Centro Comercial de Guadalmina, interviniendo una tal Marisa Berri […] siendo el vendedor Pedro José Villate Pérez, y aún cuando el precio fijado fue de 1.350.000 euros, en realidad se escrituró formalmente en 850.000 euros, abonándose la diferencia en efectivo”, dice el documento policial. Los hechos fueron denunciados por el Sindicato Unificado de Policía (SUP), por lo que se abrió un procedimiento judicial en Estepona (Málaga) contra Ignacio González y Lourdes Cavero.

"Informaba a Cospedal"

Las agendas muestran también que Villarejo informaba de la investigación que abrió sobre Ignacio González a Granados y al empresario Ignacio López del Hierro, marido de la entonces secretaria general del PP María Dolores de Cospedal. Junto al nombre “GRAN”, en alusión a Granados, el comisario jubilado escribe: “Muy receptivo y contento por evolución de IG [Ignacio González]. Mañana hablará con URB. de Boadilla. Cada vez más receptivo, hablará con ILH”, en referencia a López del Hierro.

Precisamente, la Fiscalía Anticorrupción considera que Villarejo y la expresidenta de Castilla-La Mancha rubricaron en una reunión que mantuvieron en junio de 2009 en la sede del PP en la madrileña Calle de Génova un acuerdo de colaboración que se puede constatar en las anotaciones sobre el espionaje a Luis Bárcenas. Además de aludir a esta cita en la agenda, en otras ocasiones el comisario jubilado apuntó que informaba a Cospedal de sus pesquisas sobre el exvicepresidente madrileño.

Así, el 21 de julio de 2011 Villarejo anota, junto a las iniciales “ILH”: “Adelanto sobre Ignacio G. No le sorprendió”. En otros apuntes escribe: “Muy interesado en datos colaterales”; “mensaje de entrega datos” y “propone cita con MDC”, en alusión a su mujer, María Dolores de Cospedal. Tras esta reunión Villarejo escribió: “Contacto muy positivo. Le dio mucha importancia a la info. Quedamos en vernos el jueves a las 14 horas. Insistió en su discreción”.

"A través del marido"

Y tras una nueva entrevista con Cospedal Villarejo escribe: “Muy receptiva a todo. Le parece muy importante el tema de los TC y desviaciones del partido. Propone vernos a las 14 horas el jueves en Toledo. Quedo en comunicarme a través del marido”.

En otras hojas el ex mando policial escribe que el también comisario Enrique García Castaño le propuso una cita con el expresidente madrileño en un local comercial en la Puerta del Sol. Tras la reunión, que se celebró el 29 de noviembre de 2011, el comisario anotó: “Ignacio González: muy preocupado por los datos. Queda en ayudar a la investigación (para pararla). Le facilito el 3 para contactar. Se queda muy preocupado”. Y justo después, en alusión a Granados, se puede leer: “Muy contento con los detalles de IG”.

El propio Granados habría mantenido, según la agenda, una reunión con los periodistas que dieron la exclusiva en la que se informaba de que Ignacio González disponía de un ático por el que pagaba un alquiler a un precio muy por debajo al del mercado. La posterior publicación en marzo de 2015 de la grabación de la reunión del expresidente de la Comunidad de Madrid con Villarejo acabó con la candidatura de Ignacio González a la presidencia de la Comunidad de Madrid, que recayó en Cristina Cifuentes. El Comité Electoral Nacional del PP encabezado por Mariano Rajoy y María Dolores de Cospedal sí aprobó la designación de Esperanza Aguirre como candidata a la Alcaldía de Madrid.

"Una campaña orquestada"

Pocos días después de ser defenestrado Ignacio González, en declaraciones a La Sexta, lamentó que una "campaña orquestada" hubiera "condicionado la decisión sobre la candidatura". También habló de “cacería y “ruido” mediático del PP a la presidencia autonómica.

En el mismo sentido, las grabaciones de Villarejo descubiertas en los registros policiales ahondan en la hipótesis de que Cospedal estaba al tanto de la investigación del comisario sobre Ignacio González, cuyas comisiones rogatorias fueron mal cumplimentadas en varias ocasiones. En una transcripción de un audio el ex mando policial explica a García Castaño que en 2012 ya había amenazado al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, con revelar información comprometedora que afectaba a Ignacio González, entonces vicepresidente de la Comunidad de Madrid.

"Me llamó la Cospe, no delates a nadie"

Y según el audio, la propia secretaria general habría llamado a Villarrejo poco después de esta amenaza para pedirle que no lo hiciera: "Me llamó la Cospe, joder, no delates a nadie... Y yo ¿cómo que no? Os busco la ruina a todos, al primero al barbas" [en alusión velada a Mariano Rajoy].

En el mismo sentido, Granados ya aludió en una declaración celebrada en 2018 ante el juez de 'Púnica', Manuel García Castellón, a las supuestas irregularidades cometidas por Ignacio González, aunque nunca había relatado que él hubiera denunciado ante Villarejo los hechos, tal y como consta en las anotaciones del excomisario.

Los audios de Villarejo.

Los audios de Villarejo.

La relevancia de las agendas de Villarejo ya fue defendida por el propio juez García Castellón, quien destacó en el auto en el que imputaba a Cospedal que pese a que “no pueden tomarse como hechos irrefutables”, sí “reflejan datos de los que se tiene noticia” y por ello conforman “un cronograma temporal de determinados acontecimientos” que ayudan a “situar en una concreta fecha” los hechos investigados.