La amiga de la víctima, en cuya casa se había refugiado, lo vio todo y así lo declaró: presenció cómo el sujeto golpeaba a la mujer sobre la cama, a puñetazos, y cómo luego la cogía del pelo y la arrastraba por la escalera abajo, mientras seguía dándole puñetazos. El mismo relato realizó la propia víctima, y un parte de asistencia médica confirmó que las lesiones eran compatibles con lo narrado: su ex la había cogido del pelo y arrastrado, le había dado puñetazos, patadas y amenazado de muerte, y no era la primera vez que esto pasaba. 

Los hechos que se consideran probados tuvieron lugar en un domicilio de Santomera, un mes después de que la víctima decidiese poner fin al noviazgo que mantenía con este individuo. El hombre no solo la golpeó en la casa, sino que estuvo «arrastrándola hasta, la calle donde intentó meterla en el vehículo sin conseguirlo, al tiempo que seguía con la agresión». Al lugar se desplazaron agentes de la Benemérita, para hacerse cargo del caso. El Juzgado de lo Penal nº 2 de Murcia condenó al hombre por un delito de malos tratos en el ámbito familiar a la pena de nueve meses y un día de prisión. No podrá acercarse a menos de 500 metros de la mujer.

El sujeto recurrió ante la Audiencia Provincial de Murcia, que desestimó su recurso. El individuo sostenía que todo fue un montaje preparado por su ex y su amiga para obtener la primera la residencia en España.