El Tribunal de Cuentas ha aprobado una moción para mejorar la situación financiera y el control de los partidos políticos y de las fundaciones dependientes de éstos, en la que se recogen propuestas sobre posibles modificaciones en la normativa reguladora.

Esta moción recoge hasta cuarenta y cuatro iniciativas concretas que se refieren a la financiación privada y pública de las formaciones políticas y de las entidades vinculadas a ellas y se plantean algunas modificaciones en relación a las aportaciones y donaciones privadas o las nuevas fórmulas de financiación participativa.

También contempla aspectos para mejorar "la trazabilidad del origen y destino de la financiación privada" y la gestión de los ingresos.

Otro punto que la moción tiene en cuenta son las condiciones y requisitos de las aportaciones de financiación de los grupos institucionales a las fuerzas políticas y la regulación de la subvención específica para gastos de seguridad.

Hace además hincapié en los gastos electorales y la actualización de los límites máximos de éstos y en la necesidad de contar con planes de saneamiento ante situaciones patrimoniales negativas.

Al mismo tiempo, el Tribunal de Cuentas sugiere cambios en el régimen sancionador, en concreto respecto a los tipos de infracciones y su proporcionalidad.