En las dependencias de la Guardia Civil de Langreo y la espera de declarar ante el juez ha pasado la noche el presunto agresor, marido de la víctima, de 51 años de edad. No vivían juntos, ella le había dicho que quería divorciarse, aunque no había denuncias previas por maltrato. Al parecer, él acudió de madrugada al domicilio de María Teresa, Tere para sus allegados, de 48 años. El cadáver, con un disparo de una escopeta de caza, se descubría por la mañana. Los vecinos de Pola de Laviana solo tienen una palabra para calificar lo ocurrido "pero horroroso, horroroso". "Esto es horroroso", repiten. Muchos en la localidad asturiana pensaban que algo así no podría suceder allí: "aquí vivimos en el extrarradio, pero vivimos muy tranquilos", dice una vecina, mientras otro añade "cuando se siente así cerca de casa, mal, claro". Con ella, la cifra de mujeres asesinadas por violencia machista ascendería a 13 en lo que llevamos de año.