El vicepresidente en funciones de presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, ha expresado el apoyo del Govern a los Mossos y ha rechazado los actos de violencia o de saqueo, si bien también ha pedido "no criminalizar las protestas" y no convertir los incidentes "en un pim pam pum político".

En una comparecencia y rueda de prensa realizada esta tarde, el vicepresidente se ha referido a los disturbios y demás incidentes ocurridos durante las protestas que han tenido lugar en los últimos días en Cataluña a fin de expresar el rechazo al encarcelamiento del rapero Pablo Hasél.

Según Pere Aragonès, los Mossos d'Esquadra y los demás servidores públicos cuentan con "el total apoyo del Govern", y "si ha habido actuaciones que puedan ser incorrectas, se analizarán y se actuará de acuerdo con los procedimientos que existen para garantizar la buena praxis".

El vicepresidente ha pedido entablar en el Parlament, y durante la próxima legislatura, un debate "sereno y no en caliente" sobre el modelo de seguridad ciudadana y orden público que se desea tener en Cataluña, pero ha dicho no tener ningún inconveniente en comparecer ante la Diputación Permanente de la cámara cuando así lo acuerden los grupos para dar cuenta de los incidentes ocurridos en los últimos días.

   

Ha considerado que en la situación actual ha contribuido el hecho de que "estamos viviendo un momento muy difícil en Cataluña y otros territorios, porque la pandemia ha provocado un cansancio importante en la población, pero también por el cuestionamiento reiterado de derechos y libertades ciudadanas en un contexto de represión desde hace tiempo".

   

 Ahora bien, ha advertido: "No saldremos adelante con enfrentamientos contra establecimientos comerciales o edificios institucionales, y tampoco con ataques a los servidores públicos, o causando destrozos al mobiliario urbano".

En este punto, ha subrayado que "el Govern apoya a todos los trabajadores públicos que garantizan la seguridad" desde el primero hasta el último, ha remarcado, y ha recordado que "el trabajo diario" que realizan los Mossos d'Esquadra y las policías locales "es muy importante y fundamental para garantizar los derechos y libertades".

Sobre la gestión realizada en el Departamento de Interior y en el Govern, Aragonès ha precisado que estos días ha habido "una comunicación constante entre el conseller de Interior, Miquel Sàmper, los mandos de los Mossos d'Esquadra" y él mismo, y que la crisis se afronta "de forma conjunta y con responsabilidad compartida".

Se ha mostrado partidario de que el debate sobre el modelo de seguridad y el tipo de armamento que utilizan los cuerpos antidisturbios se haga en el Parlament "con serenidad y una cierta distancia" de los sucesos actuales, tal y como ya ocurrió en anteriores legislaturas.

   

Ha avisado, sin embargo, a los grupos parlamentarios que "si desean utilizar esta situación complicada para hacer un juego político, se estarán equivocando".