Nueve de los 23 detenidos por las cuatro violaciones grupales conocidas en la provincia de València en solo seis meses -la última de ellas, adelantada ayer en exclusiva por Levante-EMV- son menores de edad. Son casi la mitad de todos los arrestados, lo que ha encendido las alarmas, dado que cada vez es más baja la edad de quienes participan en este tipo de agresiones sexuales en manada.

En el último caso, ocurrido en un municipio de la Ribera el pasado fin de semana, los tres inculpados son menores de edad. Uno de ellos solo tiene 14 años y el mayor de ellos, 17. Los tres comparecieron el martes por la tarde en la Fiscalía de Menores de València, tal como adelantó ayer este diario, y el acusador público solicitó el internamiento de todos ellos en un centro en régimen cerrado como medida cautelar.

La petición del fiscal fue atendida por la juez de Menores de guardia, quien ordenó que los tres fuesen llevados en ese momento a uno de los centros especializados dependientes de la Conselleria de Igualdad e Inclusión Social, que tiene entre sus atribuciones la gestión de menores.

Durante su comparecencia judicial, dos de los adolescentes negaron incluso haber estado en el garaje en el que se produjo la violación grupal, pero el tercero, que era amigo de la víctima, declaró que, aunque él no había participado, los otros dos sí que habían mantenido relaciones sexuales con la víctima, una niña de 15 años. Eso sí, aseguró que habían sido consentidas.

Dada la evidente contradicción, a la que se les suma la declaración de la víctima y el informe médico de su exploración en un hospital de València, el fiscal solicitó la medida de internamiento cerrado, la más dura y que se reserva para delitos graves y muy graves.

Tal como publicó este diario, la menor fue sometida a una agresión sexual en grupo, tras entrar en un garaje comunitario con uno de ellos, que la había engañado con la excusa de enseñarle su moto. La llegada de un usuario del aparcamiento hizo que cesara la violación, tras lo cual la menor regresó a su casa y contó a sus padres lo ocurrido. Los progenitores la llevaron al hospital y a continuación denunciaron los hechos en la comisaría de la Policía Nacional de Alzira.

La primera agresión grupal se produjo en la madrugada del 9 de julio pasado en la azotea de un bloque de apartamentos de un municipio costero de l'Horta, cuando dos menores -ambos de 17 años- y dos adultos -de 20 y 21 años- sometieron a una agresión sexual en grupo a una niña de 15 años.

Dos meses después, en la madrugada del 27 de septiembre, fue en un municipio de la Vall d'Albaida. Una niña de 14 años fue sometida a una violación en manada por un grupo de menores y adultos -algunos tenían 33 años- tras rodearla en una zona rural próxima a un municipio durante la celebración multitudinaria de dos cumpleaños. De los 13 detenidos, diez eran mayores de edad y los tres restantes, menores.

Dos semanas después, el 17 de octubre, se producía la tercera. Fue en un municipio de la Safor y la víctima tenía 16 años. La agresión sexual múltiple, por la que fueron detenidos dos jóvenes de 21 años y un menor, de 15, se produjo a las afueras, tras quedarse la chica sola con ellos mientras hacían botellón. Los dos adultos fueron enviados a prisión y el menor, internado en régimen semiabierto.