La Fiscalía Anticorrupción ha acusado recibo en la mañana de este lunes de una demanda e investigación contra el propietario de la naviera Armas, Antonio Armas Curbelo, y diversos directivos de Trasmediterránea, absorbida por la anterior, por supuestos delitos de quiebra fraudulenta, quebranto patrimonial, estafa, insolvencia punible, falsedad en documento público y fraude a Hacienda y la Seguridad Social, entre otros.

Ha interpuesto la denuncia el capitán de marina mercante retirado Rafael Roselló, que en su escrito presentado a la Fiscalía pide que se investigue una supuesta "venta ficticia" de la compañía de transporte marítimo por parte de Acciona, su anterior propietaria, a la naviera canaria. El escrito pide que "se proceda al embargo preventivo de todos los bienes de todas las sociedades y patrimonio personal" de Armas Curbelo, y que se cree "una gestora para intervenir legalmente a la Compañía Trasmediterránea-Armas con el fin de evaluar la situación y llevar a cabo una auditoría, antes de permitir que sea pasto de otros navieros para comenzar un nuevo episodio de escapada hacia adelante ocultando sus deudas.

En opinión del denunciante, Trasmediterránea ha sido sometida a un vaciamiento patrimonial "antes de pedir un rescate de 100 millones de euros". Se refiere a informaciones publicadas sobre la creación, en junio pasado, de una sociedad paralela a la naviera, con el nombre de Armas Trasmediterránea Factoring, a la que se habría traspasado la propiedad de diversos activos, entre ellos el buque Ciudad de Palma.

Este ferry fue parado por orden judicial el pasado 25 de noviembre a su llegada al puerto de Barcelona, por ser objeto de un embargo preventivo a causa de una deuda de 700.000 euros que reclama una pequeña firma de instalaciones de comunicaciones e informática. Dos semanas antes, fue también sometido a embargo preventivo el veterano ferry J.J. Sister en el puerto de Almería, también por deudas impagadas.

Años de denuncias

El denunciante, Rafael Roselló Cuervas-Mons, operó en aguas canarias durante la mayor parte de su carrera, y es hijo de un antiguo capitán de buque que trabajó para Trasmediterránea antes de que fuera privatizada y adquirida, en 2002, por Acciona.

Previos a la denuncia presentada este viernes, Roselló ha enviado desde 2017 escritos de advertencia sobre la situación financiera de Trasmediterránea a, entre otros, el ministro de Fomento, los presidentes de Puertos del Estado y de la CNMC, y a dirigentes de diversos partidos políticos.

En enero de 2018, el fiscal superior Jesús Caballero reenvió a la Fiscalía Anticorrupción otra denuncia anterior de Roselló, en la que advertía de "un proyecto de quiebra a medio plazo y vaciamiento patrimonial". Hasta el momento, el denunciante no ha recibido aviso alguno del inicio de investigaciones del ministerio fiscal sobre los hechos que denuncia.

En la compañía, todos los tripulantes esperan la llegada de su nómina. Un aviso interno les emplaza al próximo día 7 para cobrar, informan fuentes de la naviera.