El líder del Partido Popular, Pablo Casado, ha acusado este lunes al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, de "vender humo" en su comparecencia en el Palacio de la Moncloa, y ha señalado que demostró que "no hay ningún tipo de moral" cuando dice que "solo le importan las siglas del Presupuesto" y no Bildu.

De esta forma ha respondido Sánchez, quien tras anunciar una estrategia única de vacunación en toda España, afirmó que las siglas que le importan al Ejecutivo "son las de los PGE", es decir, la de los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Además, el presidente del Gobierno defendió que todos los partidos que apoyaron su tramitación, entre los que se incluye EH Bildu, representan "la España democrática" porque todos fueron "legítimamente" votados por los españoles cuando fueron llamados a las urnas.

"Comparecencias como las de este domingo son obscenas porque vienen a insistir en las mentiras, como en lo del comité de expertos y vienen a vender humo, la nada. Y sobre todo, vienen a demostrar que no hay ningún tipo de moral", ha resaltado Casado en una entrevista en la Cadena Cope, que ha recogido Europa Press.

Así, ha señalado que Sánchez, con sus declaraciones asegurando que "solo le importa las siglas de los PGE", quiere decir que "solo le importa la permanencia en el poder" y ha subrayado que "claro qué es importante" a quién se elige de socios para "llegar a ese fin".

En este punto, ha afirmado que él no comparte que sus escaños sean "tan válidos" como los demás grupos porque "no condena 850 asesinatos y encima dice que quiere venir a Madrid a tumbar el régimen". "Es algo que Sánchez va a llevar en su haber durante toda su carrera política", ha avisado.

En cuanto a si ve acertado el papel de la presidenta de Cs, Inés Arrimadas, en la negociación de los PGE ha dicho que "respeta" la posición de ese partido y ha añadido que el jefe del Ejecutivo "tiene elección" pero "ha elegido a los socios que quiere".

"Sánchez está de acuerdo con la idea plurinacional que tienen los independentistas catalanas y está de acuerdo con esa línea de blanqueamiento de Bildu que empezó Zapatero y él ha seguido con mucho entusiasmo", ha dicho, para añadir que si volviera a la "moderación, la sensatez y el europeísmo podrían pactar" con Pedro Sánchez pero "lo pone imposible".

Contra la ley Celaá

Por otro lado, Casado ha confirmado este lunes que las cinco comunidades autónomas en las que gobierna el PP legislarán vía decreto para evitar que la reforma educativa, conocida como ley Celáa, "socave la libertad de las familias" y para "poner a salvo la libertad educativa". Según ha subrayado, cuando hay en La Moncloa un Ejecutivo que es "malo para los intereses de las familias españolas",

El líder del PP ha asegurado que su partido acudió a la convocatoria de la plataforma Más Plurales a "ofrecer soluciones", ya que, según ha recalcado, la 'Ley Celaá' "durará solo lo que dure este Gobierno" porque si llega al Palacio de la Moncloa la derogará.

"Hasta entonces, la recurriremos al Tribunal Constitucional, a Europa porque allí sí que se defiende la libertad y las comunidades autónomas en las que gobierna el PP van a legislar para evitar que esta ley socave la libertad de las familias y para poner a salvo la calidad educativa, también en la pública", ha manifestado.

Crisis migratoria

Respecto a la crisis migratoria que afecta a las Islas Canarias, Casado ha exigido este lunes al Gobierno la repatriación de los inmigrantes que permanecen en el Muelle de Arguineguín (Gran Canaria) a sus respectivos países de origen al tiempo que ha criticado la actitud "buenista" y la posición "errática" del Ejecutivo.

El líder del PP ha cargado contra el Gobierno de Sánchez por haber pasado "del Open Arms, el Aquarius y el papeles para todos" a, en pocos días, "decir que hay que hacer expulsiones en caliente" y no "hablar de las concertinas de Ceuta y Melilla".

"La situación es insostenible", ha asegurado el líder de los 'populares', que ha señalado que España atraviesa la "peor crisis migratoria" desde 2006, cuando también gobernaba el PSOE. Por ello, y dado que "la mayoría" de los casi 600 migrantes de Arguineguín son "marroquíes" que han llegado "documentados", Casado ha pedido al Gobierno que les devuelva a su país de origen.