La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha anunciado que la futura ley de protección de la infancia y la adolescencia incluirá la suspensión del régimen de visitas de los hijos cuando su padre haya maltratado y ésta tenga una orden de protección.

Esta ley ha incorporado dos enmiendas para proteger a los menores hijos de víctimas de violencia de género, ha adelantado Rosell este miércoles ante la Comisión de seguimiento y evaluación de los Acuerdos del Pacto de Estado en materia de Violencia de Género del Congreso de los Diputados.

La primera es que los jueces estén obligados a suspender el régimen de visitas de un progenitor denunciado por violencia de género cuando se hayan dictado órdenes de protección de la madre y haya indicios de que los hijos han estado expuestos a esa violencia.

Otra enmienda está destinada a reforzar que los jueces retiren la custodia compartida a los padres en los casos de violencia de género.

Esta ley orgánica de protección integral de la infancia y la adolescencia frente a la violencia, en la que trabaja la Vicepresidencia de Derechos Sociales, también impedirá que los menores tengan que visitar a su padre a la cárcel cuando haya sido condenado por violencia de género y acabará con la aplicación del denominado síndrome de alienación parental en la concesión de custodias de menores.

En torno a la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional para la eliminación de la violencia sobre la mujer, el Ministerio de Igualdad celebrará un acto de homenaje a las víctimas de las violencias machistas y Rosell ha mostrado su deseo de que fuera un acto en el que participen todas las fuerzas políticas e instituciones.

"Mi sueño es que pudiéramos hacer un acto de conjunto, de país, les debemos un homenaje de estado a todas las víctimas -de violencias machistas-", ha expresado Rosell.

La delegada ha avanzado además que en noviembre se lanzarán tres campañas de sensibilización contra la violencia machista destinadas a la población general, los adolescentes y los hombres, ésta última para prevenir aquellas violencias que no se identifican como tales que tienen que ver con gritos, acoso y humillaciones.

Rosell ha criticado durante su comparecencia la intervención de la diputada de Voxy ha acusado al Gobierno de tener una "falsa preocupación por la mujer" cuando lo que esconde es "avaricia y ansia de poder".

La delegada ha aseverado que la inmunidad parlamentaria no puede utilizarse para depauperar la institución democrática que es el Parlamento.

Desde el PP y Vox han preguntado a Rosell por la imputación del magistrado del Tribunal Constitucional Fernando Valdés -que ha renunciado a su cargo este miércoles- por un presunto delito de malos tratos.

La delegada ha defendido que la Delegación no puede pronunciarse sobre personas que no han sido juzgadas, por respetar su presunción de inocencia: "Nunca he mencionado el nombre de ningún imputado, acusado o sospechoso de violencia machista, trabajamos sobre las víctimas", ha zanjado.