Una de las imágenes que mejor reflejó lo que supuso en marzo y abril el azote de la pandemia fue la que mostró el Palacio de Hielo de Madrid, que las autoridades tuvieron que convertir en una morgue, lleno de féretros alineados. Y es que, aunque en la última semana el covid se haya llevado por delante la vida de 10 personas, en las semanas más trágicas fallecían unas 800 personas en un día. El récord se alcanzó el 30 de marzo, jornada negra en la que murieron 888 pacientes, 37 cada hora, en toda España. Aquellos días los relatos de muchos sanitarios eran estremecedores. En cada uno de sus servicios, asistían a la muerte de una o varias personas, algunos de ellos sin estar, aparentemente graves. En total, la pandemia se ha cobrado la vida de 28.413 personas, según la última cifra oficial del Ministerio de Sanidad, pero el cómputo real es mucho más alto, porque al principio y en los momentos de máxima tensión en el sistema de salud no se realizaba test PCR a todos los fallecidos.

De hecho, el último informe del Sistema de Monitorización de la Mortalidad (MoMo) del Instituto de Salud Carlos III señala que entre el 13 de marzo y el 22 de mayo se produjeron 44.008 muertes más de las esperadas, lo que supone un exceso del 57%. Esta cifra incluye las notificadas por el Gobierno y con prueba diagnóstica positiva de Covid-19 y muchas otras que constan en los registros civiles de fallecimientos pero que no se han contabilizado en la estadística oficial probablemente son personas contagiadas que han muerto en sus casas, hospitales o residencias pero sin que se les realizara una PCR. A todos los fallecidos, irá dirigido el acto de homenaje estatal del 16 de julio.

12.627 fallecidos en Catalunya

Catalunya sí contabiliza los datos que las funerarias le remiten diariamente con prueba diagnóstica o síntomas compatibles con el coronavirus. En total han fallecido 12.627 personas desde la llegada del virus a España, 6.911 en un centro hospitalario, 4.113 en una residencia y 800 en el domicilio. Los casos restantes no están clasificados por falta de información.

Si bien, el principal agujero informativo ha estado en las residencias de ancianos. Por ello, el Gobierno solicitó a las autonomías que le facilitaran los datos de fallecimientos en estos centros, pero no ha hecho público el recuento con el argumento de que los datos de unas y otras no son comparables. Si bien, en un documento interno que ha salido a la luz se cuantifican 27.359 fallecidos hasta el 21 de junio, 9.003 con confirmación y el resto con síntomas compatibles o por otras causas.