El Consejo General de Enfermería (CGE) puso ayer como ejemplo de lo que considera una "caótica y absolutamente descoordinada" gestión del Gobierno la retirada el viernes por parte del Ejecutivo de millones de mascarillas defectuosas que los sanitarios de las diversas comunidades autónomas han estado usando durante al menos diez días.

Para el CGE, esta actuación, que calificó de "muy grave", es un ejemplo de un modo de gestión que considera responsable del "incesante" contagio por coronavirus de sanitarios sin medidas de protección adecuadas. Según los datos oficiales, hay 29.467 profesionales sanitarios contagiados, lo que supone ya el 15,67% de los casos confirmados en España.

Los profesionales que han usado las mascarillas ahora retiradas pensando que estaban protegidos, añade el CGE en un comunicado, siguen sin tener la protección adecuada y se ven obligados a reutilizar "durante tres y cinco días las que tienen", además de seguir fabricando batas "con bolsas de basura".

"Llueve sobre mojado", lamenta el comunicado del CGE. "Es incomprensible que siendo el país con mayor número de profesionales contagiados, a día de hoy sigan así, sin el material adecuado. Son muchos los centros sanitarios que siguen sin disponer de todo el material de seguridad necesario para poder prestar la asistencia sanitaria sin necesidad de jugarse la vida", añade el Consejo de Enfermería.

"Todavía hay miles de profesionales que no tienen trajes EPI adecuados, mascarillas FFP2 o FFP3, batas impermeables, protecciones oculares adecuadas, guantes...", prosigue el texto de denuncia, que resalta: "Seguimos obligando a los profesionales a jugarse su vida y a poner en riesgo la de sus familias, porque al volver a casa conviven con ellos".