El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha señalado que se van a devolver un total de 58.000 test diagnósticos del coronavirus por no tener "el nivel de fiabilidad requerido", que serán sustituidos por otros que sí cumplan con los requisitos de calidad necesarios.

Estos test rápidos con menor sensibilidad fueron detectados en una partida de 8.000 que se entregaron el pasado fin de semana a la Comunidad de Madrid. Este lote formaba parte de una compra realizada por parte del Ministerio de Sanidad de 640.000 pruebas. De ese total, solo han llegado dos entregas: la que se envió a la Comunidad de Madrid y una segunda de 50.000 test que no se ha llegado a distribuir.

Sanidad asegura que "todas ellas han sido compradas a través de un proveedor nacional a un fabricante en China y todas cuentan con marcado CE y, por lo tanto, están homologadas para su compra y comercialización en toda Europa". "Este producto tenía todas las garantías, el certificado de calidad... pero nosotros evidentemente hacemos las comprobaciones cuando llega el producto, que no tenía el nivel de fiabilidad requerido", ha explicado el ministro en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros extraordinario celebrado este jueves. "España no va a perder ninguna oportunidad de adquirir productos, pero va a ser exigente con la calidad del material, y va a hacer las comprobaciones necesarias", ha añadido.

Tras detectarse una menor sensibilidad en alguno de estos primeros 8.000 test, Salud Pública dio la orden de retirada y se han devuelto las 58.000 pruebas rápidas que ya habían llegado a España. El fabricante en China ha asumido la devolución y los reemplazará por un nuevo modelo de test. Así, el fabricante enviará en los próximos días 640.000 unidades de un nuevo modelo de test con las especificaciones y sensibilidad requeridas.

Illa ha trasladado un "mensaje de tranquilidad" a la población ante la retirada de las primeras tandas de test. "Estamos haciendo un esfuerzo para adquirir test de diagnóstico rápido que nos permita comparar mucho mejor el nivel de extensión del virus en España", ha comentado.

El ministro ha apuntado que "en los próximos días" va a llegar una "cantidad muy importante" de test rápidos dentro del acuerdo con proveedores chinos que va a garantizar un total de 5,5 millones de estas pruebas diagnósticas, que se van a revisar por las autoridades como las partidas anteriores.

Por otra parte, la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha achacado el desabastecimiento de material sanitario a la "competencia feroz" en los mercados para hacerse con productos como prevención ante el coronavirus. "Todos los países están reservando las producciones nacionales. China se ha reservado el 50 por ciento, y solo saca a exportación el 10 por ciento", ha contado, añadiendo que todo el Gobierno "está trabajando a disposición" del Ministerio de Sanidad para que el material sanitario necesario "llegue a la mayor brevedad posible".

Madrid asegura que recibió del Gobierno 9.450 test "sin validar"

Por su parte, el consejero de Sanidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha dicho que el Ministerio de Sanidad suministró a la comunidad 9.450 pruebas para detectar el contagio de coronavirus "sin validar", un material que dio 70 % de falsos negativos tras ser comprobado en laboratorio y "en el campo de batalla".

En una entrevista en Onda Madrid este viernes, el consejero también ha señalado que este fin de semana llegarán a la región los equipos de protección individual (EPI), según ha anunciado el Ministerio de Sanidad, aunque ha subrayado que Madrid seguirá buscando material "a todos los niveles".

El jueves, el ministro de Sanidad, Salvador Illa, explicó que compró una partida de pruebas rápidas para la detección del coronavirus -que luego se comprobó que no cumple los estándares- a una empresa española cuyos productos tenían la marca CE y que le dio "todas las garantías".

Ruiz Escudero también ha señalado que el Gobierno madrileño no ha recibido ninguna mascarilla de las que usan los profesionales para tratar a los pacientes, es decir las FFP2 y las FFP3, ni "buzos" ni "batas", y en este sentido ha denunciado la "cantidad irrisoria" de material que ha llegado.

Por ello, el Ejecutivo madrileño tratará de buscar el material en China, aunque ha afirmado que "no es nada fácil" por la complicación de realizar compras en ese país.

El consejero ha insistido en que la cifra real de contagios es mayor a la oficial, ya que la Atención Primaria hace un seguimiento a más de 50.000 personas con diagnóstico por teléfono, y aunque seguramente "no sean todos positivos", habrá "bastantes miles de casos" que sí lo sean y no están contabilizados.