El portavoz de En Marea, Luís Villares, ha anunciado este miércoles que no concurrirá a las elecciones primarias de su partido para elegir candidato a la presidencia de la Xunta y, por lo tanto, da un paso atrás en la primera línea política.

Después de que el proyecto que él lideraba consiguiese en 2016 ser la fuerza de la izquierda más votada, una legislatura más tarde ha decidido dar un paso atrás acreditando, ha dicho, visiblemente emocionado e incluso por momentos lloroso, que él vino "a hacer política y no a ser político. No vine a perpetuarme en ningún puesto”.

En una rueda de prensa llena de críticas a las cúpulas de Podemos, Anova y Esquerda Unida ha confesado que durante estos cuatro años al frente de En Marea sintió que la llamada con la que los dirigentes de esos partidos recurrieron a él para representar el proyecto de unidad popular en el verano de 2016 fue “una trampa” porque resultó, a su entender, una “excusa” para que “los de siempre pudiesen hacer lo de siempre”.