El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha animado a los representantes del PSC a trabajar para dar músculo a un proyecto que pueda aglutinar a toda la sociedad catalana, basado en el pluralismo y el progresismo: "Vamos a superar el debate de la autodeterminación", ha dicho.

Sánchez ha hecho esta reflexión en la reunión a puerta cerrada que ha mantenido con dirigentes, diputados, senadores y alcaldes del PSC, horas después de haberse reunido con el presidente de la Generalitat, Quim Torra, para poner en marcha la "agenda del reencuentro" que en su opinión debe llevar a la resolución del conflicto catalán.

Fuentes presentes en el encuentro han explicado a Efe que Sánchez se ha mostrado convencido de que el PSC tiene espacio para crecer en las próximas elecciones en Cataluña, para las cuales aún no hay fecha, sobre todo a costa de Ciudadanos.

De hecho, en el pasado ciclo electoral los socialistas catalanes ya recuperaron parte del electorado que perdieron en los comicios autonómicos de 2017 en favor de los naranjas, especialmente en el área metropolitana de Barcelona, apodado el "cinturón rojo" tras la Transición por su fuerte tradición de izquierdas.

Sánchez ha expuesto que el PSC tiene que ser un espacio de "encuentro" en el que se puedan sentir cómodos los catalanes de distinta ideología, y para ello ha emplazado a los representantes del partido en Cataluña a poner en valor la apuesta por el "diálogo sincero" y la obra de Gobierno que se desempeñe en Moncloa en beneficio de las capas más vulnerables y las minorías.

Al inicio del encuentro, Iceta ha definido la jornada de este jueves como "día histórico" y, a la salida, varios dirigentes del partido han coincidido en apuntar que, aunque la resolución del conflicto será algo "complicada", el encuentro de este jueves ha sido relevante para sentar las bases de un mejor entendimiento. "Teníamos miedo de que fuera mal (la reunión), pero ha ido bien", han resumido desde la dirección del partido.

Interferencias

Estos dirigentes, sin embargo, no han escondido su preocupación por las interferencias que una campaña electoral pueda provocar en el diálogo, así como en la presión que figuras como el expresidente catalán Carles Puigdemont puedan ejercer sobre otros actores más partidarios de la negociación, como ERC.

Tras reunirse con representantes del ámbito económico durante la tarde, Sánchez ha llegado pasadas las 20:00 horas a la sede de los socialistas catalanes, ubicada en la calle Pallars de Barcelona, que lleva el nombre de uno de los fundadores del PSC, Joan Reventós. Ahí ha presidido, junto a Miquel Iceta, una reunión con diputados, senadores y alcaldes del PSC en la que también han estado el ministro de Sanidad -y secretario de organización de los socialistas catalanes-, Salvador Illa, y la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias.

Alrededor de la mesa rectangular también estaban caras conocidas del PSC, como la portavoz parlamentaria y dos de Iceta, Eva Granados; el primer teniente de alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, y el alcalde de Viladecans, Carlos Ruiz, uno de los máximos valedores de Sánchez en las primarias del PSOE que le enfrentaron a la andaluza Susana Díaz.

Quien no ha podido acudir a la cita ha sido la alcaldesa de L'Hospitalet de Llobregat, Núria Marín, que a la misma hora estaba presentando su conferencia anual en la ciudad vecina y que mañana sí que se verá con Sánchez en su calidad de presidenta de la Diputación de Barcelona.