El vicepresidente de la Generalitat de Cataluña y coordinador nacional de ERC, Pere Aragonés, ha subrayado que el "autonomismo ha muerto" y el camino hacia la independencia de esta comunidad "es irreversible para millones de catalanes", algo que debe comprender el Estado y ofrecer una alternativa "solvente, articulada y leal".

En un desayuno informativo de Europa Press en Madrid, Aragonés ha recalcado que la vía del desarrollo autonómico "ha llegado a su fin" para más de dos millones de catalanes y ha instado a negociar, a "dar los primeros pasos" a pesar del conflicto de estos días en las calles, para llegar a un acuerdo entre Cataluña y el Estado. "No es un problema de orden público ni de convivencia entre catalanes, sino entre Cataluña y las instituciones del Estado", ha insistido.

Aragonés ha propuesto hoy abrir una "mesa de diálogo" sin condiciones previas, sin vetos y con garantías de cumplimiento. En este sentido, ha planteado que en esa mesa de diálogo tiene que haber reconocimiento de las partes porque, ha advertido que el Gobierno no puede seguir ignorando a los independentistas catalanes, que, ha recordado, son los que han ganado las elecciones y gobiernan en Cataluña.

Pere Aragonés ha pedido también que en esa mesa se puedan hacer propuestas con libertad y sin vetos, argumentando que él tampoco está de acuerdo con la defensa a ultranza de la unidad de España pero respeta que millones de personas la defiendan.

Y ha planteado que se pueda refrendar los acuerdos de esa manera por "amplias mayorías" y articulando un sistema democrático para ello, es decir, la votación. Además, considera que debe haber una seguridad de que lo que se acuerdo se lleve a cabo, una "garantía de cumplimiento".

En su discurso ha insistido en numerosas ocasiones en la necesidad de diálogo y negociación, ha reclamado dar ya los "primeros pasos" y ha advertido de que "el bloqueo no es bueno" porque "el conflicto corre el riesgo de enquistarse". Según Aragonés, el conflicto no es de orden público, ni de convivencia entre catalanes y ha rechazado la afirmación de Pedro Sánchez de que Cataluña no es un solo pueblo.