La Consejería de Salud y Familias de Andalucía ha actualizado este lunes el balance del brote de listeriosis, que afecta ya a 193 personas tras confirmarse un nuevo caso en Sevilla, y el cual ha considerado que ha entrado en "fase de inflexión", circunstancia que determinará que los casos de afectados bajen de forma acentuada, fase que precederá a un reguero de casos que se estima se extenderá hasta octubre.

Así lo ha indicado en rueda de prensa el portavoz del gabinete técnico creado por la Consejería de Salud y Familias para el seguimiento del brote de listeriosis, José Miguel Cisneros, que ha apuntado que la mayoría de estos casos se localizan en la provincia de Sevilla, 158 (81,6%), seguida de Huelva (17 casos), Cádiz (10), Málaga (4) y Granada (4). En las provincias de Almería, Córdoba y Jaén sigue sin haber casos confirmados.

En cuanto al número de pacientes ingresados, Cisneros ha precisado que, a fecha de este domingo, en los hospitales públicos con sospecha de infección por Listeria monocytogenes era de 83 (frente a los 77 del día anterior). De ellos, 28 eran mujeres embarazadas (misma cifra que el día anterior), y tres pacientes permanecían ingresados en UCI (el mismo número que el día anterior). En estas últimas 24 horas no se han producido muertes ni abortos ni infecciones en recién nacidos.

La distribución por provincias de estos pacientes ingresados es en Sevilla, 61 (el día anterior 55), Huelva, 14 (el mismo número que la jornada anterior); Cádiz, 2 (igual que día anterior); Málaga, 3 (el mismo número que el día anterior); Córdoba, 2 (igual que ayer); y Granada, 1 (el mismo número que el día anterior). En Jaén y Almería no hay pacientes ingresados.

Respecto a los hospitales privados, los pacientes con sospecha de infección es de 25 --22 en Sevilla y 3 en Cádiz--, de ellos 6 mujeres embarazadas (3 el día anterior) y un ingreso en UCI.

Uno de los dos casos de aborto, causa del brote de listeria

Por otra lado, en esta rueda de prensa posterior a la reunión de la comisión de seguimiento del brote, y en la que también ha participado el subdirector de Protección de Salud de la Consejería de Salud, Jesús Peinado, se ha confirmado también que de los dos abortos producidos antes de la alerta sanitaria, en uno de ellos, una paciente que estuvo ingresada en el Hospital Macarena de Sevilla, se produjo por el brote de listeria.

Cisneros, que ha anunciado que a partir de este martes la Junta de Andalucía empezará a dar los datos de afectados en España y fuera del país --tras confirmarse el primer caso de listeriosis en el extranjero--, ha insistido en que "ya se está detectando una importante reducción del número de casos frente a días anteriores", lo que quiere decir que "hemos entrado en la fase de inflexión del brote, gracias fundamentalmente a la inmovilización de la causa del origen".

Aún así, ha querido dejar claro que "esto no significa que haya desparecido el brote pero sí su virulencia" y ha añadido que "pueden surgir nuevos casos aunque de manera más tardía". También ha vuelto a destacar la "normalización" de la frecuentación en urgencias, que "puede compararse con la de cualquier domingo de agosto".

En relación a la investigación para identificar el brote de listeriosis en la fábrica de Magrudis, el Ayuntamiento de Sevilla ha confirmado a la Junta de Andalucía, que, además del positivo en las agujas de las mechadoras, ha habido otro en uno de los carros de enfriamiento posterior al horneado, según ha señalado Jesús Peinado, quien ha explicado que el Ayuntamiento deberá confirmar, en el marco de la investigación, que el funcionamiento del horno es el adecuado. "Se está verificando si la temperatura era la que tenía que ser".

También ha precisado que son cuatro los inspectores que están trabajando en la fábrica y que cuando se hace una investigación así "se investiga toda la documentación", que "suele ser ingente". Además, ha añadido que este sábado se han conocido "tres brotes negativos en superficie de junio, de tres análisis propios de la empresa".

"Se están comprobando todas las hipótesis en función de los datos que se están obteniendo", ha manifestado el subdirector de Protección de Salud, para añadir que está también la hipótesis de que pudiera haber fallado el autocontrol.

Sobre la ampliación de Magrudis, Peinado ha explicado que hay un documento de la empresa a la Delegación de Salud del 31 de julio donde informa de que "han hecho una obra que supone la anexión de una nave", y que "teníamos que haber revisado antes de empezar la actividad", ha manifestado. "Ha habido producción en toda esa nueva estructura, pero no sabemos desde cuándo", ha abundado.

Igualmente, Peinado ha querido aclarar que la empresa sevillana Comercial Martínez León comercializaba la carne mechada fabricada por Magrudis con una presunta infracción sobre el etiquetado y la información sobre el origen de la carne, por lo que Salud y Familias ha remitido una denuncia a la Fiscalía por este reenvasado de los productos de Magrudis.

"Es una carne muy mal etiquetada que si se saca de su envase original no tienen ninguna identificación", ha explicado Peinado, quien ha añadido que "aunque las cajas estaban bien etiquetadas, el problema surgió cuando en Brenes se detectaron piezas sueltas y no se podía detectar su procedencia", porque "solo tenían un etiqueta con la composición y su características nutricionales".

También ha reiterado que el pasado 23 de agosto se amplió a la alerta sanitaria a los productos distribuidos por Martínez León y ha explicado que ese día se pudo acceder a la empresa y "se obtuvo un listado de clientes --un total de 21, la mayoría en Sevilla-- a los que se vendía este tipo de productos".

"Se localizaron los establecimientos y se comprobó que no estaban distribuyendo la carne" porque el propietario de la empresa comercial les había indicado el 16 de agosto, tras llegarle una copia de un comunicado de prensa de la Consejería sobre la alerta sanitaria sobre el producto 'La Mechá', que no se comercializara", ha señalado Peinado, que ha añadido que "el sábado sobre las 18,00 horas se terminó de visitar todos los establecimientos, los cuales no vendían carne desde 7 u 8 días antes de las investigaciones".