El líder de Cs, Albert Rivera ha recalcado este jueves que no verá más a Pedro Sánchez si le llama a una nueva ronda de contactos destinada a obtener apoyos para su investidura como presidente del Gobierno, por lo que le ha pedido que se concentre en convocar a sus "socios" y en negociar con ellos.

Rivera ha hecho estas afirmaciones durante la reunión que el grupo parlamentario de Ciudadanos ha celebrado en el Congreso.

A sus 57 diputados, más los senadores, les ha comunicado que acudirá a cuantas consultas le cite el rey, pues es la cabeza visible de una formación "constitucionalista", pero ha dejado claro que no irá a las que convoque Sánchez, pues ésa no es su función, y le ha pedido que "no confunda" su papel con el del jefe del Estado.

Su función, ha incidido, es crear un comité negociador para asegurar los apoyos que le permitan sacar adelante la investidura, pero debe buscarlos entre sus "socios".

A Sánchez se ha dirigido para decirle que no puede pretender ser presidente del Gobierno y no trabajar para conseguirlo y le ha recriminado que "no mueve un dedo", por lo que no puede esperar que Ciudadanos le haga su trabajo.

Según sus palabras, lo que está haciendo hasta ahora el candidato socialista es "teatro" con la finalidad de encubrir que "no está trabajando".

"Deje de marear la perdiz, deje de hacernos perder el tiempo a los españoles, nosotros no vamos a contribuir a este teatro, si otros quieren participar del teatro son legítimos actores", ha manifestado Rivera, quien ha asegurado que su partido está esperando para "trabajar".

Rivera ha eludido hablar sobre los pactos pendientes de ultimar por parte de PP y Cs con PPVox, y se ha limitado a poner en valor las iniciativas de su grupo, como la ley para la proposición de ley presentada ayer para regular la gestación subrogada.

Pero ha lanzado críticas veladas a Vox, al reivindicar su liberalismo frente a quienes tiene "el sectarismo y la prohibición por bandera" en la derecha y ha vuelto a reivindicarse también como líder de la oposición ante el PP.

Así, ha asegurado que frente a un Sánchez que prefiere una oposición "friki o radical o corrupta", España "una oposición fuerte y firme" como la de Ciudadanos, del que ha destacado su carácter liberal y de "partido de Estado".

El líder de la formación naranja ha añadido que su modelo es "antagónico al sanchismo" que cree que se alía con EH Bildu y que quiere limpiar la imagen del terrorismo.

Por eso ha marcado como objetivo para el grupo parlamentario "torcerle el brazo a (Meritxell) Batet y Sánchez" en referencia también a la presidenta del Congreso a la que insta a poner en marcha cuanto antes las sesiones de control al Gobierno, que Rivera asegura que va a liderar.