En el caso de que la segunda votación de investidura de Pedro Sánchez resulte un fracaso, se prolonga el bloqueo político y sitúa a España de nuevo en un horizonte de incertidumbre. Las posibilidades de que la legislatura siga adelante no han desaparecido, pero la sombra de elecciones se vislumbra más cercana.

En este caso, se abriría un plazo de dos meses hasta el próximo 23 de septiembre para que los grupos políticos traten de alcanzar un acuerdo.

En este periodo, Sánchez podría volver a intentar recibir la confianza de la cámara, ya que la Constitución establece que en ese periodo "se tramitarán sucesivas propuestas" de candidatos, igual que lo puede intentar hacer otro líder político, pero tiene que ser el Rey, previa consulta con los grupos políticos, quien lo proponga como candidato.

Dos meses para disolver las Cortes y 47 días para elecciones

En caso de que no lo consigan en esos dos meses, el Rey disolverá ambas Cámaras y convocará nuevas elecciones, que se celebrarían el 10 de noviembre, 47 días después de disueltas las Cortes.

Esto es así porque al inicio de la pasada legislatura los partidos modificaron la ley electoral para introducir una disposición adicional estableciendo que, en los casos de repetición de los comicios por falta de investidura, se acortaran los plazos del procedimiento electoral, bajando de 54 a 47 días.

Tras los pasos de 2016

La repetición de elecciones ya se produjo en 2016, cuando, tras la fallida investidura de Sánchez con apoyo de Ciudadanos de principios de marzo, pasaron los dos meses sin que prosperara ninguna candidatura y las Cortes se disolvieron para repetir los comicios el 26 de junio de ese año.

En la XII Legislatura, el Rey propuso a Mariano Rajoy como candidato a la presidencia del Gobierno en dos ocasiones. En la primera de ellas, el candidato no consiguió la confianza del Congreso de los Diputados, sometiendo su candidatura a votación los días 31 de agosto de 2016 y 2 de septiembre de 2016. Sin embargo, en la segunda propuesta, sí obtuvo la confianza de la Cámara el día 29 de octubre de 2016, tras la abstención del PSOE.