Cs no prevé negociar con Vox ningún gobierno municipal o autonómico y da prioridad a un pacto a la andaluza con el PP, mientras que en las negociaciones con los barones socialistas exigirá como condición expresa el respaldo a la aplicación del 155 en Cataluña y que renieguen del "sanchismo".

De este modo, el secretario general de Cs, José Manuel Villegas, ha enfriado la posibilidad de llegar a algún acuerdo con los socialistas en comunidades como Castilla y León o Aragón, donde el partido naranja tiene la llave.

El comité nacional de negociación de gobiernos, que creó ayer la dirección de Cs, se ha reunido esta mañana por primera vez con Villegas al mando, quien ha insistido en que ve "muy complicado" llegar a acuerdos con el PSOEen comunidades autónomas salvo que "renieguen" de la política de acuerdos de Pedro Sánchez con "separatistas y populistas" y, por ahora, no han visto hacerlo a ningún dirigente socialista.

Villegas, que ha comparecido en una rueda de prensa en la sede de Alcalá, ha avanzado que en breve mantendrán una conversación con el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, y con el PP para trasladarles "los cauces de diálogo" y las exigencias naranjas para llegar a acuerdos.

Si bien la prioridad de Cs es entrar a gobernar, tal como decidieron en la última Asamblea general de 2017, contemplan quedarse al margen y apoyar desde fuera como han hecho hasta ahora si no les convence la aritmética que se alcance, en alusión a Vox y al PSOE, ha señalado Villegas.

Una fórmula que ha mencionado al ser preguntado por la opción de que el candidato de Cs, Francisco Igea, pueda acordar un gobierno con el aspirante socialista, Luis Tudanca.

Villegas ha insistido en que ven muy difícil acuerdos con los socialistas y aunque no van a pedir "ninguna inmolación a nadie del PSOE" si van a exigirles compromisos "en la unión y en la igualdad de todos los españoles" y eso implica, ha señalado, "renegar" de los pactos con Podemos y los independentistas.

No ha querido contemplar la "hipótesis" de que Vox pueda entrar en gobiernos con PP y Cs, subrayando que ellos apuestan por pactos "liberales y centrados" con partidos que estén en esa línea y no en los extremos, como en Andalucía, y los demás, -ha avisado- "tendrán que decidir cómo se posicionan".

Lo que sí tiene claro el secretario general es que "se abre una nueva era, se ha acabado el bipartidismo" porque ahora hay un partido "de centro, liberal y moderado" que va a decidir gobiernos municipales y autonómicos, ha recalcado.

En esta primera reunión no se ha hablado de ningún municipio ni territorio concreto, ha explicado al advertir que están en una fase "muy preliminar" y que las negociaciones van a ser largas y se coordinarán desde Madrid, aunque también se crearán comités territoriales para hacerlo.