El presidente del PP, Pablo Casado, ha exigido hoy "responsabilidad" para prevenir la radicalización que lleva al terrorismo yihadista y ha advertido de que quien quiera venir a España no puede tener una actividad o credo que vaya "contra otras personas" o contra su seguridad.

En su intervención ante la Junta Directiva Regional del PP de Melilla, Casado ha indicado que, aunque España es un "país plural y abierto", es necesario que quien venga tenga "una escala de valores y respeto a los derechos humanos y a la legislación".

Y eso es "incompatible" con "cualquier actividad o credo que vaya contra otras personas o contra la seguridad o integridad de otros ciudadanos", ha afirmado.

Tras al atentado frustrado de ayer en Cornellá (Barcelona), que ha atribuido a "un supuesto terrorista con motivaciones yihadistas", Casado ha reclamado ahondar, sobre todo en Cataluña, en la aplicación del Plan nacional contra la radicalización violenta, que aprobó el anterior Gobierno del PP.

"España, que es un país de paz, no admite que haya centros donde se pueden radicalizar a personas que luego puedan cometer hechos como lo que sucedió en Cornellá", ha dicho Casado, quien también ha recriminado que, prácticamente, se haya "ocultado" la motivación de los atentados del 17A en el acto de aniversario del viernes.

Ha insistido en que "hay que llamar a las cosas por su nombre", al igual que se hizo con el terrorismo de ETA, y no permitir la radicalización en centros religiosos o en barriadas, como en alguna de Cataluña, donde las autoridades "tienen la obligación de prevenir esas conductas y atajarlas".

Además, ha destacado que solo el PP está dando este mensaje "de concordia, pero al mismo tiempo de responsabilidad", y ha insistido en su petición de convocatoria del pacto contra el terrorismo yihadista, que hoy ha solicitado por carta al ministro de Justicia, Fernando Grande-Marlaska.