La comarca noroeste de La Palma desarrolla un gran Cinturón Verde para prevenir los incendios

Los incendios forestales que afectaron en 2023 a los municipios de Tijarafe, Puntagorda y Garafía, en la comarca noroeste de La Palma, han obligado a buscar medidas más eficaces para combatir la amenaza que supone el fuego en una de las zonas más frondosas de la Isla Bonita. Así, más o menos, nació la idea de un Cinturón Verde que en la actualidad mantiene activas a varias cuadrillas de operarios en la pista de la Montaña del Arco, espacio ubicado en Puntagorda a unos 900 metros por encima del mar. Allí, cerca de la Balsa de Montaña del Arco se ejecuta una obra de repavimentación del terreno que cuenta con un presupuesto de 712.366 euros.

Prevención y agricultura

Este camino no sólo supondrá una arteria principal para llegar a las zonas que estén afectadas por las llamas, sino que puede desarrollar las funciones de cortafuego en el caso de que se produzca una catástrofe medioambiental como la que se produjo hace casi dos años. Otra de las novedades que aporta este proyecto es la utilización de las zonas de medianía para la plantación de viñas, un cultivo que puede servir de barrera natural cuando se declara un incendio en un punto intermedio de una zona boscosa. En el caso del Cinturón Verde palmero la contención que se pueda realizar en Puntagorda sería fundamental para que las llamaradas no siguieran avanzando hacia la vertiente de Garafía, que, a su vez, está desarrollando con el Cabildo mejoras notables en la red de suministro de agua. Las obras que se llevan a cabo en la Montaña del Arco fueron visitadas en la jornada de ayer por Nieves Lady Barreto, consejera de Presidencia, Administraciones Públicas y Justicia y Seguridad del Gobierno de Canarias; Sergio Rodríguez, presidente insular, y Vicente Rodríguez, alcalde de Puntagorda.

Blindar la economía local que se vea afectada por las llamas es otro de los propósitos de un Cinturón Verde que cuenta con un presupuesto de casi 14 millones de euros, que ponen sobre la mesa el Gobierno de Canarias (7 millones), elCabildo (5,5) y los tres ayuntamientos de la comarca noroeste (1,4).

Además de la creación de espacios de cultivos en la zona, también está planificada la creación de un vivero de empresas agropecuarias con ayudas a los emprendedores, la reactivación de unas parcelas para el pasto y, sobre todo, generar espacios en los que el fuego pueda quedar aislado para ser atacado por los equipos de extinción.