El municipio de Tijarafe, en el noroeste de La Palma, se convierte a partir del próximo 9 de septiembre en una localidad referente a nivel mundial en lo que respecta al arte contemporáneo. Y lo hará cuando se inaugure un centro de arte promovido por una fundación privada que acogerá una de las colecciones más importantes a nivel internacional de arte de los últimos dos siglos.
La Fundación 20/21 Arte y Educación, promotora del centro y cuya misión es la educación a través del arte, construyó su sede en el centro urbano de Tijarafe. En ella albergará de forma permanente y temporal exposiciones artísticas en torno al arte internacional de los siglos XX y XXI.
La fundación será responsable del edificio y del cuidado de las obras de arte, así como de la organización de los programas y eventos en colaboración con las instituciones educativas.
Tras un proceso de selección, el estudio de arquitectura Enguita & Lasso de la Vega fue elegido para el desarrollo del proyecto por su experiencia en museografía. El edificio se construyó en el casco histórico del pueblo, en la calle de Los Poetas.
Esta instalación coloca a Tijarafe como un referente mundial del arte contemporáneo porque en su casco histórico se alza ya la estructura del futuro Centro de Arte de la Fundación 20/21. Una obra que no es municipal pero que se constituye como un regalo no sólo para el municipio, sino para toda la Isla.
La fundación pudo haber elegido cualquier ciudad europea, pero prefirió Tijarafe para, en algo más de dos años, edificar la infraestructura a la que ya se le está dotando de contenido.
El objetivo de la fundación ha sido desde un principio el generar sinergias con el territorio elegido, buscando de esa manera la inquietud en el interesado por el arte por conocer también el municipio de Tijarafe.
Hacer realidad esta infraestructura ha sido posible gracias a una inversión privada que supera el millón y medio de euros. El centro se compone de tres volúmenes, de dimensiones y alturas diferentes, que se adaptan al paisaje y a la escala de las edificaciones del entorno. En ellos se albergará de forma permanente y temporal exposiciones artísticas en torno al arte internacional de los siglos XX y XXI.
Dispondrá de una biblioteca de libros y publicaciones relacionados con el arte y sus espacios responderán a su enfoque principal, promover el arte como lenguaje educativo universal.
El edificio es el reflejo de la meticulosa presentación de obras que contiene su interior. Desde la cálida bienvenida de su impresionante biblioteca de referencia en la entrada del edificio hasta las elegantes exposiciones en las salas, emana rápidamente el profundo compromiso con el arte que se respira entre los muros. Además, sus salas polivalentes son adaptables para poder dar cabida a eventos de distinta índole, tales como actividades escolares, proyección de películas o conferencias; una señal evidente de que compartir con el público y fomentar el diálogo es el enfoque de su misión.
El director administrativo del proyecto, Hendrik Kehren, considera que «el arte es un lenguaje visual con un potencial increíble para explicar historias del pasado y transmitir todo el abanico de experiencias de la vida cotidiana». Por eso, añade que «cuanto más nos abramos a este lenguaje visual, mejor nos irá como humanidad para navegar cautelosamente hacia el futuro».
El museo contará con más de 1.200 obras, que ofrecen un abarcable resumen del arte de ese periodo, tanto a nivel histórico como de expresión contemporáneo, el cuidadoso trabajo de comisariado con el que se han elaborado sus exposiciones y su biblioteca de referencia, con más de 3.000 libros, que «invitan al público a visitar el espacio más de una vez para así poder hacer una investigación más profunda», destaca Kehren.
Se ha designado la misma cantidad de espacio a exposiciones permanentes como a temporales, que cambiaran cada 6-8 meses, con el objetivo de proveer al visitante una experiencia de arte tanto de fundamento cómo de dinamismo, que tal vez animará a instituciones educativas y ciudadanos a utilizar sus recursos.
