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Crisis volcánica | Un año de la erupción de La Palma

Las bodegas del Valle doblan la uva vendimiada tras la erupción de La Palma

El sector vitivinícola se recupera de la crisis provocada por la sequía y las consecuencias del proceso volcánico y aspira a conseguir en esta campaña cifras similares al año 2018

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Primera vendimia de La Palma tras la erupción del volcán Tajogaite Andrés Gutiérrez

La erupción del volcán Tajogaite sepultó 17 hectáreas de viñedos y afectó gravemente a otras 40 en el Valle de Aridane, provocando cuantiosas pérdidas en este subsector agrícola, llevando a mínimos históricos la producción de vino palmero, que un año después consigue recuperarse doblando sus cifras.

De las 18 bodegas integradas en el Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de La Palma, tan solo dos están ubicadas en la zona afectada directamente, siendo la histórica Bodegas Tamanca la de mayor producción. La familia Simón se encarga de gestionar el patrimonio que sembró su patriarca, don Federico, quien supo repartir entre sus hijos las responsabilidades para sacar adelante la bodega, las cosechas y el restaurante del mismo nombre, que también permanece cerrado después de un año del inicio de la erupción.

El primogénito, Federico, es quien supervisa la producción de los vinos de Bodegas Tamanca. Sus instalaciones sufrieron directamente las consecuencias de la erupción, al estar ubicadas en la zona de exclusión por su proximidad al cono principal. Hace un año, en plena vendimia, tuvo que suspenderse la entrada de uva en las bodegas, quedando más de una docena de sus viticultores sin la posibilidad de finalizar la vendimia. Sin embargo, en esta campaña, las previsiones son positivas.

El histórico de los últimos años, afectados por la sequía y ahora el volcán, sitúan en torno a los 30.000 los kilos de uva recolectados, esperando para esta campaña de vendimia, en pleno desarrollo, superar los 60.000 kilos. Federico recuerda que «el año pasado pudimos hacer la mitad de la vendimia con normalidad, teniendo una cosecha baja». Luego, reconoce, «el gran problema era poder acceder a la bodega», ya que desde que se inició la erupción se planteó la dificultad de llegar hasta el viñedo debido a la ceniza, los gases y la cercanía y peligrosidad de la propia erupción.

900 mil kilos. Es la previsión que se maneja desde la DO Vinos de La Palma en cuanto al total de uva que se recogerá en esta vendimia, frente a los 552.00 kilos que se sumaron en la anterior.

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«El año pasado lo pudimos superar de aquella manera», se lamenta Federico, agradeciendo la implicación de Bodegas Noroeste, en Tijarafe, que prestó sus instalaciones para la elaboración de los vinos de Tamanca, realizándose allí el proceso de transformación, fermentación y embotellado, lo que supuso «salvar la cosecha».

«Este año es diferente porque, a nivel general, la cosecha es mucho mejor, y creo que incluso vamos a superar las perspectivas que tiene el Consejo Regulador», destaca Simón, apostando que, a nivel insular, se estará por encima de la previsión de un millón de kilos de uva, «doblando así nuestra producción de los últimos años».

A pesar de ello, en las zonas cercanas a las coladas del Tajogaite, «es verdad que la cosa está flojita», destacando el bodeguero que se compensa con las cepas situadas más al sur o bien al norte, donde la cosecha está «muy bien». Y es que la ceniza afectó a parras de toda la Isla, haciendo que se perdiera la uva que la vendimia anterior aún estaba en la parra, y cubriendo de material en torno a 40 hectáreas. De ellas, señaló Federico Simón, «unas 20 serán irrecuperables» y sobre las restantes «seguimos trabajando para recuperarlas», haciendo hincapié en que «donde la capa de ceniza no supera los 15 centímetros, las parras y las cepas tienen más vigor». También pone de relieve que las variedades que se siguen cultivando en esta zona de la Isla «son las mejores para adaptarse a los terrenos volcánicos y a nuestro suelo», añadiendo que «no es nada nuevo», ya que «para lo bueno y para lo malo somos producto de los volcanes».

De las 18 bodegas de la DO Vinos La Palma sólo dos se ubican en la zona afectada directamente

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Respecto al futuro del sector, el bodeguero señala que lo atisban «con optimismo e ilusión», aunque se lamenta de que persista el problema del envejecimiento de los agricultores, «que tienen pocas ganas por recuperar sus fincas y no muestran ilusión de seguir». Simón, por el contrario, destaca que «hay gente joven y hemos conseguido renovar al sector».

Panorama complejo

La gerente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Vinos de La Palma, Eva Hernández, destaca que, en términos generales y a nivel insular, se presenta una vendimia más abundante que la del año pasado. Hay que tener en cuenta que la vendimia dio comienzo el pasado 2 de agosto y es previsible que continúe hasta finales de octubre pero, de momento, la previsión que se tiene en la DO es que la producción pueda alcanzar los 900.000 kilos, lo que supone un importante incremento respecto a la cosecha anterior, que fue de 552.000 kilos.

Recalca Hernández que se trata de previsiones, ya que «todavía queda mucha uva en el campo y muchos días de vendimia y puede pasar cualquier cosa». Además, hace hincapié en que en la zona afectada por las cenizas del volcán «la planta se ve con fuerza, principalmente en la zona alta de Las Manchas, lo que nos da esperanzas de cara al próximo año, ya que se ve la viña con mucho vigor lo que garantiza una buena vara para la próxima poda».

La problemática que también se encuentran en esa zona es que muchas plantas «han enraizaron en falso y sin agua de riego, que haga que profundicen las raíces con cualquier estrés hídrico, podrían secarse las plantas». En definitiva, señala que «en la zona de la erupción el panorama es bastante complejo».

17 hectáreas sepultadas. Un total de 17 hectáreas de viñedos quedaron totalmente sepultadas por la erupción en la zona del Valle de Aridane y otras 40 se vieron afectadas por el efecto de las cenizas.

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Mejoras en la red de riego

La consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca del Gobierno de Canarias, Alicia Vanoostende, visitó esta zona de producción vitivinícola para anunciar mejoras en las redes de riego y carreteras de acceso a viñedos en el sur de La Palma. Informó que Agroseguro está terminando de realizar las valoraciones de los viñedos sepultados por la lava y afectados por la ceniza para poder hacer el ingreso de las ayudas destinadas a compensar las pérdidas de producción a los viticultores que no pudieron terminar de recoger su uva en la campaña del 2021.

Asimismo, la consejera destacó que las ayudas POSEI para el cultivo de viña por superficie se ha incrementado en más de un 40% desde 2019. De esta manera, para las explotaciones no aseguradas la ayuda se incrementa de 1.635 euros a 2.310 euros y las aseguradas de 1.800 euros a 2.530 euros en 2022 tras la última modificación realizada.

La titular regional recordó que desde su departamento están trabajando en la recuperación de la viña en la zona de Las Manchas y también en el municipio de Fuencaliente, donde la falta de lluvia ha provocad que se pierdan cultivos, un problema que se ha visto agravado por la erupción volcánica. Para ello, desde GMR se está desarrollando un estudio de necesidades de riego para en las zonas de mayor urgencia y así acometer obras que posibiliten el riego para un cultivo que tradicionalmente había sido de secano.

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