La empresa encargada del mantenimiento de las desaladoras, instaladas en Puerto Naos para garantizar el ruego de las zonas situadas al sur de las coladas del Tajogaite, paralizó la actividad como consecuencia de los impagos por parte del Gobierno de Canarias.
Las afectadas son las empresas contratadas para la instalación y la subcontratada para su mantenimiento, que desde hace varios meses no reciben ninguna prestación por parte del Ejecutivo regional para la ejecución de los servicios. Ante esta situación, decidieron paralizar la actividad la tarde noche del pasado miércoles.
Estas desaladoras se instalaron en esa zona para garantizar el agua de mantenimiento necesaria en las fincas afectadas, garantizando unos 6.000 metros cúbicos de agua en el lugar.
Ha sido el portavoz de Coalición Canaria en el Cabildo de La Palma, Juan Ramón Felipe, quien ha denunciado la situación, exigiendo al Gobierno de Canarias que solucione inmediatamente la paralización de las desaladoras provocada por que las empresas «llevan varios meses sin cobrar».
Por eso, recalca que «es muy grave lo que está pasando y corre riesgo la nueva cosecha que se está plantando», advierte Juan Ramón Felipe, ya que «de nuevo, los agricultores están sin agua de riego por culpa de una mala gestión, mientras el Cabildo calla y mira hacia otro lado».
Recuerda también Felipe que el agua que proveen las desaladoras es la única opción para los plátanos y otros cultivos de la zona comprendida entre El Remo y las Hoyas Ondas, «en tanto que el Cabildo no culmine la obra de canalización que ha retrasado durante meses», señaló.
El portavoz nacionalista también hizo hincapié en que «el Gobierno de Canarias, que presume cada semana de todo el dinero que está llegando a la isla, no sea capaz de pagar la factura de las desaladoras es grave», insistiendo en que «esta gestión va a acabar con el cultivo del plátano en el Valle».
En CC llevan reclamando desde octubre, junto al sector agrícola afectado, que se garantice el agua de riego. En ese contexto, Juan Ramón Felipe señala que «es una cuestión vital para nuestra economía, pero no se ha solucionado en 10 meses».
Por su parte, el consejero de Aguas del Cabildo de La Palma, Carlos Cabrera, consideró «inadmisible» esta situación que no está generada por problemas técnicos y si relacionada con «la falta de entendimiento» en los pagos a la empresa encargada del servicio.
Cabrera reclama al Gobierno de Canarias, responsable de esos impagos, celeridad en la resolución de esta situación, recalcando que en estos días se había conseguido estabilizar el servicio aportando agua a los agricultores para regar cada siete días. Así, recalcó que desde el Cabildo «no logramos entender cómo es posible que se haya llegado a esta situación y esperamos que el Gobierno de Canarias solucione este grave problema».
Esa resolución llegó durante la tarde de ayer, confirmada por la Consejería de Transición Ecológica, encargada de este servicio prestado por las desaladoras, que distribuyó un vídeo en el que se podía comprobar como a las 17:18 horas la maquinaria de las dos instalaciones volvían a estar en marcha 24 horas después de su parada.
