La última de las plataformas vecinales de afectados creada, la que aglutina a los residentes de los caminos de Pampillo y Todoque, mantiene su reclamación sobre la vuelta a los territorios ocupados por la lava. Así lo trasladó una de sus portavoces, Elena Jiménez, quien recalcó la necesidad de su colectivo de «hacer visible su mensaje e interpelar a la valentía de todos los responsables de la reconstrucción del Valle de Aridane».
Esta iniciativa surge de la necesidad que tienen los vecinos que residían en el camino de Pampillo, en el barrio de Todoque, de tener la oportunidad de «renacer de sus cenizas» en el mismo lugar donde tenían sus raíces, en algunos casos desde hace muchas generaciones. «Apelamos a la valentía política. Tienen la responsabilidad histórica. Busquen alternativas», reclamó Jiménez.
La portavoz de la plataforma manifestó el deseo de los vecinos de Pampillo - Todoque de «estar protegidos» defendiendo su objetivo de «volver a casa». Allí, dijo que «nos asentaremos de forma distinta» de igual manera que lo hicieron con anterioridad al 19 de septiembre, «sobre lavas milenarias».
Una de las primeras peticiones realizadas por esta plataforma es la de que se reconstruya el antiguo Camino Pampillo por el trazado original, respetando las propiedades de los vecinos. Igualmente defienden que «el suelo sigue siendo propiedad de quien lo tenía», rechazando la protección de las coladas ya que «lo que importa es dar opciones de arraigo a quienes aquí vivían y además generar oportunidades para la agricultura o para desarrollo de infraestructuras».
Además, este grupo de vecinos subraya la importancia de una gestión ética de todo el proceso de recuperación social y económica de La Palma, es decir, «que se cuente con las familias damnificadas, no solo desde la perspectiva económica, sino también desde el vínculo emocional que mantienen con este espacio del Valle de Aridane».
