Tras casi 50 años en el coqueto mercado de abastos de la capital palmera -treinta de ellos regentando un espacio propio-, Ana Delia Guerra, una de las trabajadoras más veteranas, recibe un merecido homenaje por parte de sus compañeros y de las instituciones públicas.
Toda una vida al servicio de la ciudadanía detrás de un mostrador de la Plaza del Mercado de Santa Cruz de La Palma. Esa es la experiencia vital desarrollada por Ana Delia Guerra quien, tras casi 50 años en la conocida Recova de la capital palmera, recibe un merecido homenaje por parte de sus compañeros e instituciones.
Por este motivo, el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma hizo entrega a esta trabajadora de una placa honorífica en reconocimiento a su figura, una de las comerciantes más veteranas de La Recova quien, a lo largo de los últimos 48 años –30 de ellos regentando puesto propio–, se ha convertido en un referente de la venta de productos del sector primario y la alimentación en este coqueto mercado de abastos.
Nacida en el municipio de Puntallana, a lo largo de tres décadas ha permanecido al frente del puesto número 11 de la Recova, un tiempo en el que ha manifestando una total vocación de servicio y ofreciendo siempre una atención sencillamente exquisita, tanto a quienes visitan el mercado como a sus clientes habituales.
Ana Delia lleva «trabajando toda la vida», según ella misma confiesa, aunque no oculta que está «ya cansada». Aprovechó el acto del reconocimiento para agradecer a toda su clientela la confianza que le ha mostrado durante todos estos años, sintiéndose «agradecida a todos ellos por el cariño con que siempre me han tratado».
Ella sigue firme al frente de su puesto, en el que brinda a la clientela «todas las cositas del país», tal y como le gusta llamarlas; «siempre quiero ofrecer lo mejor», explicaba «aunque a veces se falla», dijo la comerciante con tono profundamente emocionado tras recoger el reconocimiento de las manos del alcalde de Santa Cruz de La Palma, Juan José Neri.
Echando al vista atrás, también recordaba que comenzó trabajando en un puesto de flores y cómo a lo largo de los años «las instalaciones que han cambiado mucho», de igual manera que el público que acude a esta plaza de mercado. Ellos «siguen pidiendo las cosas tradicionales de la tierra», destacaba Ana Delia, quien no dudó en agradecer y valor cómo, de un tiempo a esta parte, se sumen clientelas más jóvenes frente a las tradicionales de este tipo de establecimiento. En el ámbito laboral, el nombre de Ana Delia Guerra y su trayectoria están íntimamente ligado a la venta de frutas, verduras, hortalizas, legumbres y tubérculos de la tierra.
A la edad de 22 años comenzó su trayectoria profesional en el Mercado Municipal de Abastos, junto a su hermano Tomás Guerra Hernández. Años más tarde continuó su labor en otro puesto, en el mismo recinto santacrucero, y fue a partir del 9 de octubre de 1992 cuando se independizó como empresaria autónoma. Desde entonces y hasta hoy, Ana Delia Guerra Hernández ha convertido su puesto de trabajo en un escaparate de verduras y frutas frescas, de hortalizas de temporada, y de legumbres y tubérculos de esa gran huerta que es la tierra fértil de la isla de La Palma.
La Semana del Mercado
Este homenaje se inscribe en el marco de la celebración de la Semana del Mercado, una cita con la que sus organizadores pretenden poner en valor el trabajo, la calidad de los productos y la fortaleza de la economía local en un espacio que hoy es un punto neurálgico de la capital de la Isla, Santa Cruz de La Palma.
Este acto de reconocimiento profesional coincide, además, con el 136 aniversario de este espacio de referencia para la venta de productos del sector primario de la Isla, como parte de la programación de actividades de la VI Semana de La Recova.
El programa de esta celebración continuará con la elaboración y demostración en directo de una degustación culinaria a cargo del alumnado de PFAE Sabor Saucero, actuaciones musicales y el ya tradicional sorteo de una cesta de productos locales entre la clientela habitual de la Recova.
