Un equipo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales (Gietma), acompañados por personal del Instituto Geológico Minero Español (IGME), ha recogido datos de temperatura en distintos puntos de la nueva colada del volcán de La Palma, lo que dará una información "muy valiosa" sobre su evolución.

Casi un mes de comenzar la erupción, el volcán en Cumbre Vieja sigue arrasando plantaciones agrícolas con una nueva boca en el área del cono principal, que expulsa gran cantidad de cenizas y lava, además de provocar numerosos temblores (este sábado se registró el seísmo de mayor magnitud, de 4,6, en Mazo, a 37 kilómetros de profundidad).

Un equipo del Gietma -la Unidad de la UME cuyo cometido es intervenir en todo el territorio nacional o en el extranjero para apoyar a las autoridades civiles en una situación de emergencia declarada por Riesgos Tecnológicos y Medioambientales- ha recogido durante la noche datos de temperatura sobre la nueva colada.

En concreto, los militares, ataviados con trajes de aproximación, cámara térmica y sonda de precisión, miden la temperatura en diferentes puntos mientras la colada avanza para, posteriormente, volver a hacerlo y ver si su temperatura ha variado.

Dichas variaciones ofrecen "información valiosa" sobre la evolución de la colada, ha informado el Ministerio de Defensa.

Desde el inicio de la erupción del volcán el pasado 19 de septiembre, 190 miembros de la UME realizan tareas de vigilancia y seguimiento del avance de la colada, control de gases, seguimiento de nubes de humo y toma de muestras de lava.

Además, apoyan en el acompañamiento de las personas evacuadas a sus domicilios para la retirada de las pertenencias prioritarias, a las que ofrecen ayuda psicológica.