Los episodios de altas temperaturas registrados en La Palma durante los últimos días provocaron daños en la producción de la uva malvasía, uno de los tesoros varietales de la Isla Bonita, que se verá mermada en torno al 90 por ciento de cara a la próxima vendimia.

Este vino, aromático y exuberante, es probablemente el más emblemático de los caldos embotellados en La Palma, situándose a la altura de los grandes vinos dulces del mundo, y cuya principal producción se sitúa en la zona de Llanos Negros, en el municipio de Fuencaliente.

Allí se han vivido temperaturas constantes cercanas a los 40 grados que impiden la maduración de la fruta, quedándose verde, y que también provoca graves daños en la propia planta.

Este episodio de calor que afecta a todas las variedades sembradas en esta zona de La Palma hace peligrar las cifras que se preveían como una buena vendimia, y que ahora, con el calor, se enfrenta de nuevo a cifras negativas según las previsiones de las bodegas palmeras. Y es que, si en el año 2015 se cosecharon 1,4 millones de uva en la Isla, ya el pasado año fueron sólo 430.000 kilos, y que con este episodio de calor se espera también una merma importante.

La responsable regional del Sector Primario, Alicia Vanoostende, que visitó la zona afectada en Fuencaliente, lamentó que «tras un invierno positivo, los problemas derivados de la ola de calor han afectado negativamente al cultivo de la viña, con pérdidas de producción importante».

Asegurar los viñedos

La titular de la Consejería de Agricultura y Ganadería apeló a la «necesidad de asegurar los viñedos, más si cabe cuando las ayudas del POSEI a la hectárea de viñedo para los tomadores del seguro son mayores que para los agricultores que no estén bajo esa cobertura; el seguro agrario es prioritario para nuestro sector». A Vanoostende la acompañó el vicepresidente del Cabildo de La Palma, José Adrián Hernández, quien hizo balance de los daños en los cultivos y destacó que «existen zonas muy afectadas como Llanos Negros, Machuqueras o Las Manchas», por lo que los técnicos de la Institución insular están haciendo las valoraciones en fincas con producción por debajo de 400 kilos por hectárea para que tengan derecho a la ayuda correspondiente, así como las evaluaciones a efectos fiscales para que los afectados puedan acceder a las deducciones que les correspondan.

A la visita también acudió el presidente del Consejo Regulador, Adalberto Martín, que insistió en los efectos de la inesperada ola de calor que incide en la vendimia de este año, apuntando a la prioridad de que lleguen las ayudas para sufragar todas estas pérdidas a los agricultores.