El Cabildo de La Palma se ha visto obligado a solicitar al Ministerio de Medio Ambiente una prórroga para poder realizar las inversiones comprometidas en la ejecución del Centro Ambiental y Recreativo de Mendo, afectado por la paralización de los trabajos tras la quiebra de la empresa adjudicataria. El proceso de edificación sufre un retraso considerable tras la quiebra de la primera empresa a la que se adjudicó la construcción de la obra civil, trabajando actualmente el Cabildo insular en la recuperación del proyecto, que está en manos del Colegio de Arquitectos, para realizarle distintas actualizaciones, y de nuevo volver a licitarla. Este traspiés administrativo está suponiendo un retraso de varios años en la infraestructura que estaba prevista abrir sus puertas a comienzos del 2021.

El consejero insular de Turismo, Raúl Camacho, destacó que “el de Mendo es un proyecto ambicioso que aúna la parte amateur y lúdica, con ese centro de observación y centro de naturaleza”, lamentando que su obra civil sufre “el revés de la quiebra de la empresa adjudicataria de los trabajos”, lo que obligó al Cabildo de La Palma a recuperar el proyecto y, tras hacer una consulta al Colegio de Arquitectos, proceder a modificar “lo que entendíamos que podrían ser algunas deficiencias”, añade. Igualmente, el Cabildo se ha visto obligado a solicitar una prórroga en la ejecución del presupuesto adjudicado por el Ministerio de Medio Ambiente, como consecuencia de los retrasos acumulados por la paralización del proceso de construcción.

Camacho defiende que este centro “es importantísimo y también es ese complemento al centro de visitantes del Roque de los Muchachos, para que todas las personas que quieran y no tengan que desplazarse hacia el Roque también tengan un punto de observación”, completando la oferta astroturística. El presupuesto es de 5,5 millones, de los que casi la mitad proviene del Estado. Este proyecto iniciado en el año 2015 mantendrá el diseño original adjudicado, pero el consejero insiste en que se realizarán modificaciones. El centro se ubicará en unos terrenos en el entorno del paisaje natural protegido de Tamanca y del parque natural de Cumbre Vieja, que durante años estuvieron ocupados por un vertedero y una planta incineradora de residuos, y ahora se convierte en una infraestructura diferenciada, que contribuirá a fortalecer los atractivos de la Isla tanto para la observación astronómica como para la práctica de deportes al aire libre, permitiendo contribuir a dinamizar la economía insular y generar empleo ligado a valores por los que se distingue La Palma, como su naturaleza y la calidad de su cielo.