La isla de La Palma podrá disponer de una tasa única e igualitaria que acabe con las distinciones territoriales actuales que provocan que el precio del agua pública varíe según el lugar a donde es transportada y almacenada. Se trata de una de las demandas históricas de regantes y ayuntamientos, principalmente del Valle de Aridane, que hasta ahora tenían que pagar el sobrecoste de elevación y transporte desde las zonas este y norte de La Palma, llegando incluso a provocar un incremento de hasta un 50% sobre el precio inicial en determinadas épocas del año.

Hasta ahora, el agua pública de La Palma cuesta un máximo de dos céntimos de euros más por pipa de agua – lo que equivale a 500 litros– en la comarca oeste que en la este. El precio se encuentra estipulado en 9 céntimos/pipa para municipios como San Andrés y Sauces, Puntallana o Santa Cruz de La Palma, mientras que El Paso, Tazacorte y Los Llanos de Aridane tienen que abonar hasta 11 céntimos por la misma cantidad de agua. A este precio hay que añadir además un canon por la elevación y transporte, que está estipulado en 0,50 céntimos por pipa. Esta situación provoca que el municipio de El Paso sea precisamente el que paga el agua pública más cara de la Isla, ya que a la tasa por consumo tiene que añadir los costes de elevarla por el sistema de Aduares, situado en Breña Alta.

Será mañana cuando la propuesta de establecer un precio único para la pipa del agua y para el canon de transporte llegue a la Junta General del Consejo Insular de Aguas. En este encuentro, el consejero responsable del Área, Carlos Cabrera, pondrá sobre la mesa distintos informes que avalan crear una tasa única en ambos conceptos que permitan igualar los precios del agua en cualquier punto del territorio insular, acabando de una vez por todas con las distinciones.

El objetivo de esta iniciativa es que un regante de Fuencaliente, Tijarafe o cualquier consistorio de la Isla tenga el mismo costo independientemente de si es necesaria elevar esa agua o transportarla de un punto a otro de La Palma. De salir adelante esta propuesta, la decisión puede favorecer principalmente al sector primario palmero, castigado por una perentoria sequía y que, además de recibir con alegría las lluvias de las últimas semanas, puede ver aliviados los costes de producción con esta decisión tomada en el seno del Consejo Insular de Aguas.

Además, las lluvias de las últimas semanas y la decisión de proceder al tranque de los cierres de ambas bocas del túnel de trasvase está propiciando la recuperación de los niveles del acuífero, que si hace unos meses estaba “a cero”, afirma el consejero Carlos Cabrera, ahora se ha elevado hasta en 33 metros según las comprobaciones realizadas hace una semana. Estos datos, unidos al deshielo de las nevadas de la borrasca Filomena y las de este fin de semana, permiten ser más optimistas de cara al próximo verano. Debido a esta situación, el suministro de casi 2.000 pipas a la hora que producía la boca oeste del trasvase se sustituyó por el transporte de los excedentes de agua en la comarca norte, enviada a Los Llanos de Aridane, El Paso y Tazacorte por la elevación de Aduares.