La Dirección General de Costas remite al Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma la autorización definitiva que permite a la playa capitalina contar con tres kioscos y hamacas casi cuatro años después de su inauguración.
Juanjo Cabrera, alcalde de Santa Cruz de La Palma, destaca que "tenemos que vestir la playa para que sea un espacio más atractivo", un objetivo en el que "infraestructuras tan básicas como los kioscos eran imprescindibles". Serán elementos desmontables de unos 20 metros cuadrados, con terrazas de 50 metros cuadrados.
Cabrera informó que "uno de los kioscos estará situado en la zona más al sur de la playa, otro se instalará a la altura de la calle Apurón y el tercero se colocará junto al parque infantil, frente a la intersección entre la Avenida Marítima y la Avenida del Puente, aproximadamente". Mientras, las hamacas se distribuirán también en el norte de la zona de baño.
Explotación externa
Los tres kioscos y las hamacas serán explotadas por empresas externas. A propósito, el consistorio palmero tiene prácticamente finalizada la elaboración de los pliegos para sacar a concurso público los negocios, con el objeto de que todas las empresas interesadas tengan las mismas oportunidades de lograr su gestión, que inicialmente se adjudicarán por cuatro años.
Juanjo Cabrera aclaró que el diseño de los kioscos fue elaborado desde el Ayuntamiento, por lo que los adjudicatarios tendrán que adaptarse a la estética ya acordada para mantener en todo caso el atractivo que se pretende para el frente marítimo de Santa Cruz de La Palma. Adelanta que "ya hemos recibido el interés de empresarios y emprendedores del sector de la restauración por desarrollar su actividad en la playa".
El alcalde subraya que a partir de ahora "uno de nuestros objetivos prioritarios es cumplir con los trámites administrativos para publicar la licitación en el menor tiempo posible". Y es que "no parece lógico ni deseable que llegue otra temporada de verano sin que la playa tenga infraestructuras que los usuarios demandan".
El consistorio intentó previamente contar con el visto bueno de la Dirección General de Costas para desarrollar en este espacio otras actuaciones, entre las que destacaba la recuperación de las canchas deportivas que fueron eliminadas con la playa, alternativas que fueron rechazadas por Costas "al no ajustarse a su actual legislación".
Antes de la realización de la obra de protección del litoral de Santa Cruz de La Palma, plasmada en esta zona de baño, ese perímetro costero contaba con un espacio destinado al aparcamiento de vehículos, uno de los principales problemas actuales con los que cuenta la capital debido a la carencia de los mismos, y con unas canchas deportivas públicas que contaban con centenares de usuarios diarios. Incluso, la maqueta previa a la realización de la ejecución de los trabajos contenía en esa zona sur de la playa esos espacios de esparcimiento deportivo que finalmente no fueron construidos por no tener la autorización para actuar en la playa.
