El Tribunal Supremo ratifica la anulación del Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico de Santa Cruz de La Palma (Pepcha), tras no admitir el recurso municipal, confirmándose la condena y la obligación de tener que reiniciar todo el proceso administrativo del documento que protege el casco histórico a la vez que ampara actuaciones turísticas emblemáticas.

El máximo órgano judicial no admitió el recurso de casación interpuesto por el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma contra la sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicias de Canarias por la que se anulaba el Pepcha de la capital palmera.

En esa sentencia, el TSJC falló la disconformidad a derecho de este plan, aprobado por acuerdo del Pleno del Ayuntamiento de 10 de septiembre de 2018, y procedió a su anulación a raíz de un recurso presentado por la compañía San Telmo SL, aludiendo a que "no acredita la sostenibilidad económica del plan". "Por consiguiente", añade la sentencia, "no reuniendo la memoria de sostenibilidad económica el contenido que le es exigible", determina su nulidad absoluta.

El documento suspendido también recibió en su proceso administrativo el visto bueno del Consejo de Gobierno del Cabildo de La Palma y la comisión insular de Política Territorial y Patrimonio Histórico. Anteriormente el Pepcha había recibido los informes favorables de las demarcaciones de Costas, Puertos del Estado y Aviación Civil, así como del informe de evaluación del impacto de género del Instituto Canario de Igualdad, dependiente de la consejería de Presidencia, Justicia e Igualdad del Gobierno de Canarias.

Con este documento se pretendía establecer la normativa para la puesta en marcha de determinadas actuaciones turísticas que se integren en la zona de protección de la ciudad. En líneas generales, se pretendía que fuera un plan que permitiera la agilidad administrativa en la tramitación de licencias y garantiza la protección de uno de los conjuntos arquitectónicos y urbanísticos más sobresalientes del archipiélago.

El espacio afectado por esta resolución es el conjunto arquitectónico y urbanístico delimitado por la ermita de La Luz, al sur; el Barco de la Virgen, al norte, y el barrio de San Sebastián y el antiguo convento de San Francisco, al oeste.

Desde el Ayuntamiento capitalino confirman que la sentencia del TSJC y la posterior decisión del TS "supone un serio contratiempo para el municipio, ya que el Pepcha debe rehacerse prácticamente desde su inicio", cumpliendo nuevamente con los plazos establecidos para atender los trámites fijados desde el punto de vista administrativo, suponiendo un impedimento para "el desarrollo de actuaciones turísticas emblemáticas y respetuosas con la conservación del conjunto histórico de la ciudad", aunque advierte de que en el menor plazo posible se reiniciará el procedimiento para contar con un Plan Especial con todas las garantías jurídicas.