El Cabildo de La Palma ha dado por extinguido el gran incendio forestal que se declaró en el municipio de Garafía el pasado día 21 de agosto, que se inició en la zona de Catela y que afectó a una superficie total perimetrada de 1.180 hectáreas.

La consejera de Medio Ambiente del Cabildo de La Palma, María Rodríguez, ha agradecido en un comunicado la rápida y eficaz actuación de todos los efectivos que trabajaron en la extinción de este incendio, así como su esfuerzo y entrega para hacer frente a esta emergencia que sufrió la isla en pleno verano.

También ha valorado como "ejemplar" la "respuesta inmediata y coordinada de todas las administraciones que se volcaron con Garafía, dotando al operativo de los medios y recursos necesarios para frenar y controlar el incendio".

El incendio afectó a una importante superficie de la comarca noroeste de La Palma, dañando tanto zonas de monte, de cultivos, como de la interfaz urbano-forestal.

El fuego castigó importantes hábitats naturales de la zona, como el pinar o el Fayal Brezal Canario y obligó al desalojo de varios núcleos poblacionales, para garantizar la seguridad de las personas, produciéndose daños materiales en viviendas y cultivos.

La consejera indicó que han pasado dos meses desde que se produjo el fuego hasta poder darlo por extinguido, lo que pone de manifiesto la gravedad del incendio sufrido en Garafía.

Por ello ha reiterado su llamamiento a extremar todas las precauciones para evitar que se produzcan nuevos sucesos de esta naturaleza que representan un riesgo grave para las personas y para el medio natural.

María Rodríguez señaló por último que desde las distintas administraciones se está trabajando para cooperar en la recuperación de los daños materiales sufridos por los vecinos de la zona y en materia ambiental, así como en actuaciones que minimicen los procesos erosivos por escorrentías.