La consecuencia de la escasez de lluvia en La Palma provoca que uno de sus subsectores agrícolas, la apicultura, este sufriendo los peores resultados de producción de miel en su historia. Esta situación incita que el Cabildo insular instrumente una ayuda de 7.200 euros para la adquisición de alimento que permita sobrevivir a las abejas palmeras.
La sequía está provocando la desaparición de la floración en las medianías de La Palma, que afecta a la supervivencia de este pequeño animal, y la prácticamente totalidad de las pérdidas en la producción de mieles de la Isla.
La ayuda concedida posibilita la adquisición de un producto configurado con azúcares sintéticos que permiten mantener las colmenas pero que impide que elaboren miel.
La situación, que afecta a toda la Isla, es especialmente sangrante en la comarca oeste, en la que se sitúan prácticamente la mitad de los apicultores palmeros, y que desde hace más de un año no producen ni un kilo de miel. Se trata de un número importante de apicultores que cuantifican importantes pérdidas económicas y, sobre todo, cientos de colmenas en peligro de subsistencia.
El vicepresidente del Cabildo de La Palma y consejero de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Adrián Hernández Montoya, destaca que la Institución es consciente de la difícil situación por la que atraviesa el subsector de la apicultura por lo que aprobó esta subvención demandada por la Agrupación de Defensa Sanitaria, así como de la importancia que representa la abeja en el medio natural y su incidencia en las actividades agrícolas.
En la concesión de estas ayudas se tuvo también en cuenta el valor que representa la polinización de plantas cultivadas y silvestres, sobre todo en frutales, hortícolas y forrajeras en la que repercute positivamente la presencia de colmenas en sus proximidades.
Ante esta grave situación, la ADS Apicultores de La Palma propuso como única opción viable en estos momentos aportar alimentación artificial a las colmenas para mantenerlas vivas hasta que haya un cambio de tendencia climatológica. La subvención aportada por el Cabildo permitirá a los apicultores hacer frente al 50% del coste estimado de esta alimentación sintética.
