Dos extrabajadores de la empresa pública Sodepal, dependiente del Cabildo de La Palma, denuncian el supuesto acoso laboral al que se vieron sometidos por parte de la consejera delegada de la entidad y a su vez consejera insular de Promoción Económica, Raquel Díaz.

El documento de denuncia, registrado en la oficina de la entidad para su traslado al Consejo de Administración, deja constancia de la acusación realizada por estos dos empleados que, durante trece y cinco años, respectivamente, realizaron labores en las distintas encomiendas de Sodepal.

Hacen especial hincapié en que desde julio de 2019, cuando se hizo cargo la actual consejera Raquel Díaz, hasta la fecha de sus despido, fueron objeto de "presiones constantes" de la responsable política, considerándolas como "acoso laboral", indica la denuncia. Desprecio y cuestionamiento personal son otros calificativos que estos dos trabajadores plantean hacia la relación que mantenían con Díaz, quien incluso señalan que supuestamente "limitó las tareas, el acceso a información para el desempeño del trabajo, la supresión arbitraria de funciones que nos correspondía desempeñar y veníamos desempeñando de manera ininterrumpida durante todo nuestro contrato de trabajo con la Empresa Sodepal", reclaman.

Estos dos trabajadores también denuncian que en el trato personal eran objeto de separación del equipo de trabajo e ignorados por la consejera delegada y la nueva gerente, nombrada recientemente, "quienes escasamente se dirigían de forma personal hacia nosotros más que para recriminarnos el trabajo realizado en ediciones anteriores o hacernos saber que por mucho que les explicáramos no lograban entender que funciones habíamos desempañado en la empresa anteriormente", señalan en el escrito presentado.

En relación a la nueva gerente, señalan que fue contratada "en medio del confinamiento" con la encomienda de crear y organizar al personal en grupos de trabajo, "pero no tuvo ni un solo contacto con nosotros", por lo que los dos exempleados denuncian que "recibió órdenes, desde el minuto uno de su contratación, para prescindir de nosotros en la empresa".

Esta situación laboral que describen indican que también las están sufriendo en menor o mayor medida otros trabajadores de la empresa pública tras la incorporación de la consejera delegada Raquel Díaz, "siendo una situación nueva, inusual y jamás vivida en Sodepal", llegando incluso "a generar el llanto de los trabajadores debido a los gritos, humillación y desprecio que reciben", lamentan.

Oficialmente el motivo de los dos despidos, comunicados el pasado 31 de julio, es el supuesto "escaso rendimiento", lo que para los dos afectados tiene que ver con la continua retirada de funciones y labores, aunque tampoco entienden que en tres meses, en un periodo de confinamiento y teletrabajo, la nueva gerente haya podido tomar esa decisión sin estar dictada políticamente.

Piensan por tanto que se trata de un despido improcedente, "que se pretende justificar en el escaso rendimiento de nuestro trabajo", queriendo a través de la denuncia ante el Consejo de Administración de la empresa pública dejar constancia de "nuestra verdad y de nuestra vivencia durante aproximadamente un año con Raquel Díaz llevando las riendas de la empresa pública Sodepal".

Por último, los dos trabajadores no reclaman ser readmitidos en la empresa pública, al menos mientas la dirección de la misma se mantenga en las mismas personas, pero aclarando que su intención es la de proteger a otros compañeros que siguen pasando "por el calvario que hemos sufrido nosotros". Reclaman así un ejercicio de transparencia, responsabilidad e imparcialidad, solicitando al Cabildo de La Palma y al Consejo de Administración de la empresa pública Sodepal "que ponga estos hechos en conocimiento de la autoridad laboral competente en la materia para que incoe ésta, a instancia de parte, la correspondiente investigación de estos hechos".