El consejero de Aguas del Cabildo de La Palma, Carlos Cabrera, negó ayer la información facilitada por el ingeniero Carlos Soler en el documento elaborado tras la visita de este al túnel de trasvase la semana pasada, en la que afirmaba que los cierres de las galerías perdían una gran cantidad de agua. Cabrera no comparte "en absoluto" y considera "incorrecta" esa apreciación de que se esté perdiendo agua, haciendo hincapié en que "toda galería tiene su cierre que no es hermético, va perdiendo agua que se recupera por las canalizaciones" y que posteriormente "también es aprovechada", precisó.

El dirigente del Consejo Insular de Aguas confirmó la recepción de ese informe y el de los otros técnicos que participaron en la visita para estudiar la intervención en el túnel de trasvase y que ya están en manos de los técnicos de la institución insular, quienes serán los encargados de tomar una decisión. Acusó también a Carlos Soler de ofrecer "información tergiversada para confundir y generar incertidumbre", ya que desde su punto de vista no se puede compartir que se esté perdiendo agua "porque esa situación no es correcta".

Ante eso, Carlos Cabrera defendió que desde el Consejo Insular de Aguas de La Palma se quiere llegar a acuerdos sobre el túnel de trasvase, mostrándose de acuerdo "en el fondo y no en la forma" en muchos aspectos que Soler expresa en su documento técnico. Entre esas coincidencias, la necesidad de establecer un mejor mantenimiento de la infraestructura, para lo que dijo que ya se elaboró un informe y proyecto en enero de 2020, que estima en dos millones de euros la cantidad necesaria para solucionarlo. Por último, Cabrera aseveró que en el informe Soler se propone la perforación de un kilómetro en la galería Hermosilla, de la que "discrepamos", pero confirmó que se "va a estudiar".

Pésimo mantenimiento

En el informe, Soler expone que el mantenimiento de la infraestructura "brilla por su ausencia", lo que provoca pérdidas de agua "incalculables" por los cierres practicados en la galería. Destaca que "las pérdidas son tan visibles que en Hermosilla tienen un canal para sacarlas y en Las Breñas una bomba para achicarlas". Esas pérdidas podrían llegar hasta 260 pipas por hora, que equivale durante todo un día a la cantidad de agua necesaria para mantener durante el verano a una explotación platanera del tamaño de 15 campos de fútbol.