El Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma abonó durante los dos últimos meses de confinamiento más de medio millón de euros en facturas a proveedores de la propia Administración local con el objeto de mitigar, al menos en parte, los graves efectos económicos del Covid-19.

Desde el Consistorio se señala que "el coronavirus nos obliga a un esfuerzo notable de personal y recursos económicos por atender desde Servicios Sociales a las familias más castigadas por la nueva crisis económica que estamos viviendo, garantizando sus prestaciones básicas", pero a la vez marcando como objetivo el articular medidas para priorizar el pago a empresas y profesionales que ofrecen sus servicios al Ayuntamiento, alcanzando hasta la fecha un volumen considerable de facturas.

El Consistorio capitalino indica que es consciente de que "nuestros autónomos y pequeñas y medianas empresas necesitan en estos momentos cobrar los trabajos o servicios realizados antes de la pandemia para poder salir adelante".

El Ayuntamiento también ha diseñado un paquete de medidas que se pondrán en marcha para beneficiar a las empresas de Santa Cruz de La Palma y que serán compatibles con las aprobadas por otras instituciones.

Con el comienzo de la aplicación de las medidas de la Fase 1 del desconfinamiento, también las terrazas de los bares y cafeterías de la capital palmera esperan poder paliar los efectos de la crisis económica con el aprovechamiento de esos espacios de negocio. El Ayuntamiento capitalino muestra su deseo de ser "flexible" con el espacio a ocupar por las mesas y sillas.

Policía Local y técnicos de la institución ya visitaron todas y cada una de las terrazas de la localidad, asesorando a los propietarios de los negocios hosteleros en las distancias entre cada mesa y ampliando, en la medida de cada posibilidad, el espacio para la colocación de cada una. El objetivo es la reactivación de este sector en las mejores condiciones posibles.