El Cabildo aprobará el estado de emergencia climática a través de un acuerdo institucional en el próximo pleno ordinario, que se celebra este viernes.

Esta declaración iniciará un proceso de educación, formación y concienciación a toda la población sobre la crisis ecológica que representa esta situación y el enorme cambio necesario para frenar la emergencia.

La consejera de Cambio Climático y Servicios, Nieves Rosa Arroyo, valoró y agradeció el consenso alcanzado en el Cabildo de La Palma para "dar respuesta al mayor reto ambiental que afrontamos como sociedad". Un desafío en el que la Isla es "por su situación geográfica, por su insularidad y por su biodiversidad, especialmente vulnerable", tanto a los actuales como a los futuros impactos del cambio climático sobre su sistema natural, social y económico.

La realidad, tal y como recoge la propuesta que irá a pleno, es que cada vez son más los estudios que constatan los efectos y consecuencias del cambio climático en el Archipiélago canario, como el aumento generalizado de las temperaturas, el descenso general de las lluvias totales y una intensificación de las sequías.

La declaración de emergencia climática compromete al Cabildo a asignar los recursos necesarios para hacer frente a esta crisis, así como a crear un equipo de trabajo específico en la materia. Además, se contempla la realización de una evaluación de los riesgos y vulnerabilidad de La Palma ante el cambio climático como trabajo previo necesario para la elaboración de un plan de adaptación.

Otro de los aspectos que contempla la declaración pasa por tener en cuenta en la planificación territorial instrumentos más específicos, como los destinados a reducir la demanda de energía en el espacio público o los planes de emergencia ante situaciones de sequía. Del mismo modo, compromete al Cabildo a la elaboración de un Plan de Movilidad Sostenible, que promueva modelos de movilidad que ahorran energía mediante la aplicación de sistemas inteligentes de transporte.