Tan solo uno de los siete enanos de hormigón que fueron hundidos en el mar, frente a la costa de Santa Cruz de La Palma, se mantiene de pie y además la figura carece del gorro, según la información facilitada por submarinistas, que grabaron un vídeo en la zona hace apenas dos meses.

El proyecto de creación de un Parque Temático Submarino se inició en 2014 con el hundimiento de las figuras y fracasó en 2015 después de que su impulsor, el popular Juanjo Cabrera, curiosamente ahora alcalde, perdió las elecciones aquel año y el nuevo grupo de gobierno que se creó antaño, con el socialista Sergio Matos al frente, decidió abandonarlo. Dos años después, en 2017, Lanzarote sí apostó por una idea similar y creó el primer museo submarino de toda Europa.

Los submarinistas que han visitado el lugar confirman que "el único enano que está de pie no tiene gorro y gracias a eso está de pie. Todos los que allí vamos decimos lo mismo, que se gastaron el dinero para nada cuando era una apuesta segura, muy atractiva para los que practicamos este deporte". "Estamos en La Palma y aquí casi todo es criticar lo que se hace. Luego la idea la copian en otros lugares, todo el mundo la apoya y sale para delante. Es lo que tenemos y a veces es mejor no hacer nada", sentencian.

El Parque Temático Submarino tuvo pronto su primer reconocimiento. En apenas unos meses, y sin estar ni mucho menos finalizado, se incluyó en la guía Bucear en Canarias 2, un trabajo del fotógrafo y naturista Sergio Hanquet, con los fondos marinos más interesantes de las islas. El dato más clarificador sobre el interés que el hundimiento de los enanos despertó fue que todavía hoy los especialistas contratados para elaborar la Guía del Buceo de La Palma, presentada la semana pasada, incluyen este espacio como uno de los 40 de la Isla para inmersiones.

Esta iniciativa no se justificaba tan solo en ofrecer una posibilidad más de turismo alternativo. Las siete figuras de 1,63 metros y aproximadamente 450 kilos de peso, diseñadas por Miguel Marzán, que se encuentran frente al espigón norte de la playa, tenían además como objetivo crear vida en una espacio prácticamente desértico.

Se pretendía crear un arrecife artificial en el litoral capitalino mediante el hundimiento de diferentes pecios o la implantación de diversas estructuras submarinas a modo de biotopo, repartidas en diferentes puntos. Los enanos de hormigón sumergidos cuentan con distintas cavidades para permitir la anidación de especies marinas.

"Ese objetivo se estaba logrando y rápidamente", cuentan los submaristas que mejor conocen la zona. Y es que "al principio había hasta meros, pero el lugar se fue abandonando y algunos pescadores aprovecharon para capturar todo lo que había". "Nos hemos encontrado, incluso una de ellas perdida, con la cuerda rota y llena de peces; la abrimos para que salieron", sentencian.

La idea municipal era al principio representar la danza mágica de las Fiestas Lustrales, con el hundimiento de hasta 24 figuras similares a las siete primeras.