La casa en la que nació el Padre Díaz, un sacerdote adelantado a su tiempo que acabó siendo una figura clave en la política, la educación, la cultura y la beneficencia en la Isla durante la primera mitad del siglo XIX, llegando incluso a ser desterrado durante once años a Tenerife por sus pensamientos liberales, se convertirá a lo largo de 2020 en un alojamiento turístico peculiar en Santa Cruz de La Palma.

La responsable del proyecto aseguraba ayer a este periódico que las obras "ya han comenzado" pero aclaró que todavía hoy no se puede asegurar si será un albergue juvenil o tendrá otro modelo de explotación. "Aún no lo sabemos", subrayó. Tampoco supo especificar el número de camas que tendrá (rondará la treintena) ni tampoco la fecha de apertura. Y es que "estamos trabajando en el interior (del inmueble) y luego decidiremos la figura (extrahotelera) que tendrá", explicó.

De todas formas, de una y otra manera, todo apunta que será un tipo de alojamiento 'Bed and Breakfast' o en su forma abreviada B&B, hoteles que ofrecen precios moderados. La expresión inglesa se traduce como 'cama y desayuno'.

Los promotores del proyecto cuentan con una referencia en Santa Cruz de La Palma que los avala de manera notable: el Hotelito 57, un establecimiento con encanto en el que se ha cuidado hasta el más mínimo detalle, ubicado curiosamente, o quizás no tanto, en las cercanías de la casona para su nueva inversión. Al preguntarle por la rentabilidad de esta doble inversión turística en la capital, su responsable defendió que "Canarias en general es un lugar para invertir" en este sector.

El padre Díaz fue propietario de esta casa donde nació por herencia intestada de su hermana Mariana. Llegó a estar casi en ruinas, o al menos en un estado pésimo de conservación, hasta que a principios del siglo XXI sus nuevos dueños desarrollaron un proyecto vinculado al mundo de la restauración. Invirtieron gran parte de los ahorros de toda su vida para que el inmueble volvieran a recuperar la luz y el protagonismo de antaño. Así nació el Mambrino, restaurante que mantuvo la denominación de un bar ubicado en aquella vivienda en tiempos pasados.

La edificación no solo linda con la calle Cabrera Pinto, sino que además tiene su fachada principal a la avenida del Puente, por lo que no es descartable que dentro del proyecto turístico se decida mantener una zona, al menos pequeña pero privilegiada por su ubicación, para la atención al público en general.

Al ser cuestionado por esta actuación, el alcalde de Santa Cruz de La Palma, Juanjo Cabrera, manifestó que "cualquier inversión que genere economía en nuestra ciudad es beneficiosa para todos". En este caso, "se trata de un nuevo proyecto turístico con encanto, en un lugar privilegiado, que vendrá a sumarse a la oferta que ya tiene la capital".

En este sentido, hay que destacar los pequeños hoteles que durante los últimos años se han ido repartiendo sobre todo por el casco histórico, aprovechando las nuevas normativas que facilitan estas explotaciones, a lo que se unirá el Hotel Marítimo después de que finalicen las obras de reforma a la que está siendo sometido.

Mientras tanto, la figura del sacerdote seguirá siendo recordada gracias al monumento que preside la plaza de España. El mismo que en sus homilías solía recordar que "un pueblo católico puede ser también un pueblo libre".