Las abundantes lluvias registradas el pasado domingo, con más de 150 litros por metro cuadrado en San Andrés y Sauces, 106 en Breña Alta o 96 en La Laguna de Barlovento, han supuesto un incremento del 5% en la media del nivel de agua embalsada en la Isla, una cifra insuficiente para la sequía que afecta al territorio insular. Lo más preocupante ha sido que en el Valle de Aridane, donde precisamente hay mayores necesidades hídricas, no cayera prácticamente ni una gota.
En este sentido, el consejero insular de Aguas, Carlos Cabrera, manifestó que "el agua siempre es muy bien recibida y estábamos esperando que lloviera. Ha llovido, pero es insuficiente". Ahora confía en que "pueda seguir lloviendo en las próximas semanas, en los próximos meses, porque el incremento que se ha producido en los distintos embalses de la Isla es de aproximadamente un 5%, lo que no es mucho porque estábamos y estamos en una situación mala".
Y es que con las lluvias del domingo la situación y las decisiones futuras no cambian en exceso. A propósito, Cabrera señaló que "ver llover es un alivio, pero hay que tomar medidas ante la sequía". Y es que "aunque llueva de aquí al verano y llueva mucho, vamos a tener que tomar una serie de medidas" que se analizarán en la reunión de la Junta de Gobierno del Consejo Insular de Aguas "que se celebrará muy pronto".
El responsable de Aguas apunto que "frente a la sequía tan importante que estamos sufriendo, tenemos que tener otras infraestructuras en funcionamiento".
