Los Llanos de Aridane gusta honrar a su Patrona con cierto glamour. Dicho de otra manera: es una celebración un poco pija. Pamelas, tocados, algunos sombreros, ellos sus mejores trajes, los zapatos recién limpios... Es su forma, no todos ni todas (lenguaje inclusivo), de entender el cristianismo. O, al menos, esa celebración religiosa concreta. No es posible saber lo que opinará Nuestra Señora de los Remedios.

El relato del evento se suele encuadrar en las plegarias de la Alcaldía. Pero es mejor ir un poco antes. La parroquia matriz está en obras, por lo que la misa, para ser más exactos la solemne eucaristía, se trasladó a los bajos de la Casa de la Cultura. Allí, el sacerdote en la homilía, Julio Adolfo Ribot Rodríguez, párroco de Nuestra Señora del Rosario en Valle Guerra, calificó con rotundidad, de manera vehemente, "lo impresionante de la grandeza ante la cual nos encontramos", en referencia a la Virgen, "la unión entre lo natural y lo sobrenatural (...). Punto de encuentro entre Dios y sus criaturas". Lo decía convencido. "Es un misterio que nos desborda", subrayó. Se refería seguramente a ser "Virgen en lo físico" incluso después del parto.

Entre los asistentes, la clase política. Aquellos a los que se les pide un acuerdo pronto para la gobernabilidad de la Isla. Anselmo Pestana estaba cerca del consejero también socialista Basilio Pérez, y a su lado, Nieves Hernández, la 'mano derecha' de Mariano Hernández en el Cabildo. Nieves Lady Barreto, la presidenta insular, y Ana María de León, directora insular de la Administración General del Estado, estaban (casi) juntas. Hernández Zapata conversaba con la diputada Lorena Hernández.

El cura aseguraba que en Dios "no hay error. No hay mentira (...). Son verdades que desbordan". Y razón no le falta, al menos en lo último. Hay que tener mucha fe para estar convencidos de su dogma... Enfrente, no era momento para negociar. Quizás luego se vieron en privado. La sensación, tal vez solo fuese eso, es que entre Pestana y Barreto hay un especie de río lleno de cocodrilos. No se antoja acuerdos entre ellos.

El coro, mejor decir el Orfeón Elías Santos Abreu y la Coral Nuestra Señora del Pino, con un músico de los grandes de la Isla, Fernando Felipe Martel, al piano, cantaba de manera afinada lo de que "gloria a Dios en el cielo y en la tierra ...". El sacerdote iba en la misma línea y recordó la boda en Galilea, cuando "Jesús convirtió el agua en vino". Sí, es verdad, que hay que ser cristiano y creyente. O te quedas a la mitad. Y es que más fácil de arreglar parece el pacto en el Cabildo, y por ende el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma, y después de más de un mes todavía no hay arreglo.

Luego llegó la ofrenda. La alcaldesa, la popular Noelia García, agarró el micrófono y le pidió ayuda a la Virgen. Si la Patrona se pudiera expresar tal vez le diría que con mayoría absoluta de doce concejales ya debería tener suficiente. "Nos enseñas a permanecer en pie en medio de las tempestades", apuntó la regidora dirigiéndose a la Patrona. Fue incluso más lejos, para pedirle "que nos ilumines y nos des sabiduría para hacer lo mejor".

"Serás siempre la reina de nuestras almas, de nuestros corazones. Eres el camino seguro, el mejor camino". La alcaldesa hablaba y, delante, Mariano Hernández miraba al limbo. Zapata aún debe estar dando vueltas a la posibilidad que tiene de ser presidente, y a la negativa, por ahora, de Génova.

La alcaldesa ofreció a la Patrona "nuestra ilusión, ganas y perseverancia para conseguir un municipio mejor". No lo debe olvidar: se lo dijo a la Virgen.