La Laguna compra dos edificios en pleno casco histórico para Turismo y Hacienda

La doble operación supera los 4 millones de euros

Se abrirá una oficina turística en La Carrera y el Área de Hacienda irá a la Casa Franco de Castilla

El inmueble que albergará la oficina de turismo.

El inmueble que albergará la oficina de turismo. / El Día

El pleno de presupuestos del Ayuntamiento de La Laguna dejó ayer un titular más allá de la prevista aprobación de las cuentas municipales para 2025: el Consistorio comprará dos inmuebles relevantes en pleno casco y los destinará a dependencias dedicadas al turismo y al área de Hacienda.

El primero de ellos es el ubicado en la confluencia de las calles de La Carrera y Viana. Este albergó el Restaurante Sorgin Gorri y desde hacía años se encontraba cerrado y en proceso de venta o alquiler. Fuentes oficiales del grupo de gobierno situaron el importe de la operación en torno al millón de euros. El portavoz de CC, Fran Hernández, expresó durante el pleno que allí se abriría una oficina de información turística.

Más sorprendente, si cabe, es la segunda adquisición. El Ayuntamiento lagunero se hace con la Casa Franco de Castilla, una construcción de mediados del siglo XVIII y que en su etapa más reciente fue sede de una notaría. La idea es situar allí «toda la atención tributaria» y «es posible que también el Consorcio de Tributos», indicó el grupo de gobierno.

La Casa Franco de Castilla, futura sede del Área de Hacienda.

La Casa Franco de Castilla, futura sede del Área de Hacienda. / El Día

Según los datos aportados este jueves por la oposición durante la sesión plenaria, el importe global de ambas compras supera los cuatro millones de euros. «¿Es necesario gastarnos 4,5 millones aproximadamente en dos edificios? ¿Lo necesitamos ahora mismo?», preguntó el portavoz del PP, Juan Antonio Molina.

Terminado el pleno, y para el caso de las futuras dependencias de turismo, el gobierno local argumentó que la adquisición la justifica que La Laguna no dispone de «una oficina de información turística propia y en óptimas condiciones»; que hay que descongestionar la primera planta de la Casa de los Capitanes; la conveniencia de concentrar en un mismo edificio la oficina de información turística, los servicios del área y la parte técnica; la oportunidad de crear allí aseos públicos, y que la iniciativa también permite «establecer servicios públicos en bienes patrimoniales que en la actualidad comienzan a denotar síntomas de falta de conservación, y que de esta manera podrán ser salvaguardados por la administración pública, enriqueciendo el valor de nuestro casco histórico».

Estas compras se unen a otra que se conoció el octubre: el inmueble ubicado en la confluencia de las calles Viana y Herradores, junto a la plaza del Hermano Ramón, para las oficinas del Área de Obras e Infraestructuras.

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