La Mesa Mota pide auxilio

La zona entre la Mesa Mota y El Púlpito continúa su degradación sin que nadie lo remedie. El motocrós y el 4x4 siguen campando a sus anchas en el lugar y el espacio cada vez presenta una situación más preocupante. Erosión del terreno, nuevos caminos creados en mitad de la vegetación, barranqueras generadas por la acción de las motos y todoterrenos, hoyos aquí y allá, raíces de árboles que han ido perdiendo la cobertura de tierra, un descampado de varios miles de metros sin vegetación alguna cerca del camino Cumbre de Cocó... La imagen actual es de difícil calificativo.

La realidad que vive la zona ha sido denunciada por Unidas se Puede. El líder de esta formación política en La Laguna, Rubens Ascanio, detalló que acudieron a la Agencia Canaria de Protección del Medio Natural, que ya les dio respuesta y ha derivado el asunto al Cabildo de Tenerife. «La idea no es prohibir la actividad; la actividad ya está prohibida fuera de los espacios legalmente autorizados», expresa el concejal lagunero. «Esa prohibición ya existe; no es una prohibición que estamos pidiendo. Lo único que estamos solicitando es que se cumpla la normativa», añade.

El pasado miércoles, en una visita con este periódico, Ascanio no salía de su asombro. Un día laborable cualquiera, a media mañana, y se escuchaba ya a lo lejos el rugido de una moto. En particular, la zona que viene concentrando una mayor actividad –y la consiguiente degradación– es el bosque próximo a la Montaña del Español, más conocida como Las Antenas, por las torretas de telecomunicaciones que se encuentran en el lugar. Hay puntos en los que la erosión y las hendiduras son tales que resulta difícil caminar.

Rubens Ascanio urge una solución. «No puede ser lo de yo en el espacio público puedo hacer lo que quiera porque me gusta una práctica deportiva u otro tipo de actividades; eso es la ley de la selva», argumenta, antes de enumerar los problemas que, más allá del daño natural, ocasionan este tipo de deportes en lugares donde no están permitidos: molestias vecinales, peligro para senderistas por velocidades excesivas e interacciones negativas con el ganado.

Aunque en El Púlpito-Mesa Mota el problema es especialmente flagrante, Ascanio detalla que este se amplía a otros enclaves del municipio, como es el caso de la zona de Los Valles, Gonzaliánez e, incluso, áreas próximas al Parque Rural de Anaga. «Tenemos que aplicar la normativa, y la normativa lo que regula es que en zonas de protección de suelo agrícola o natural no se puede hacer esa actividad y, evidentemente, tenemos un problema grande», expresa sobre la situación global.

«Estamos en una zona urbana en la que, entre los 157.000 habitantes de La Laguna y los 200 y pico mil de Santa Cruz, se engloba una cantidad de población que requiere de espacios naturales y, además, tenemos población turista que viene de forma temporal, y hemos de regular los usos para hacerlos sostenibles», manifiesta. Y prosigue: «Anaga, por ejemplo, es una zona que no se puede sobreexplotar ni sobrevisitar. Los espacios verdes del municipio hay que potenciarlos; tenemos toda la red de parques periurbanos que están en el Plan Insular de Ordenación y que no se han desarrollado o que se encuentran en fase de desarrollo, y ahora de lo que se trata es de regular esas actividades, tal y como se está demandando por parte de sectores de la población para que se hagan de forma legal».

Valbuena y Hernández

El caso de la Mesa Mota tiene la complejidad de que allí han venido confluyendo otros problemas aparte de la degradación por el motocrós y el 4x4. Un edificio en ruinas, la situación extraña que genera la práctica del cruising y una carretera destrozada son otras circunstancias que dañan la imagen de este espacio. Los primeros pasos para revertir la situación se empezaron a dar de la mano de José Antonio Valbuena (PSOE) en su etapa como consejero de Medio Ambiente del Cabildo de Tenerife, que emprendió la recuperación paisajística. Después, y en el período de gobierno 2019-2023, el exconcejal lagunero José Luis Hernández (Unidas) impulsó, entre numerosos proyectos, las reforestaciones en la zona y trató de poner coto a las referidas prácticas deportivas.

«Nosotros queremos dejar claro que esta es una práctica que no es legal fuera de los lugares autorizados y permitidos», puntualiza Rubens Ascanio. «En La Laguna los lugares autorizados son los caminos que en el Plan General de Ordenación permiten el tránsito de vehículos a motor, aunque evidentemente tampoco es que sean caminos para la práctica del enduro o el tránsito de quads o 4x4. Si se quiere buscar una alternativa, lo lógico y natural es que se trabaje con el Cabildo de Tenerife en eso», manifiesta.

El concejal de Unidas recuerda que hace años se propusieron algunas fórmulas, como la posibilidad de convertir el antiguo vertedero de Montaña del Aire en un espacio para la práctica de este tipo de actividades. «También se llegó a plantear hace tiempo, con respecto a la antigua cantera que hay en la zona de la Dársena Pesquera, que podría ser un espacio del ámbito metropolitano donde pudieran autorizarse este tipo de prácticas», agrega. Años después el problema sigue y, en un lugar como la Mesa Mota, sin una solución a la vista.