Termina la edición del retorno de la Semana Santa a las calles laguneras, que es también la del regreso de Juan Antonio Pérez a la Presidencia de la Junta de Hermandades y Cofradías (JHC), de la que ya había sido su máximo responsable entre 2005 y 2009. Recién finalizada esta celebración, Pérez muestra buenas sensaciones con el resultado, aunque admite que hay aspectos a mejorar para el próximo año.
¿Qué balance hace de la Semana Santa?
Ha sido la Semana Santa del reeencuentro después de estos dos años de pandemia, y con una profunda emoción y con gran participación sobre todo de personas en las calles. Ahora se abre un período de un año para preparar las cosas todavía con mucha más solemnidad. Después de estos dos años ha sido complicado volver a iniciar la maquinaria, más si cabe con la incertidumbre que teníamos con los cambios de recorridos y con las medidas covid.
Bastante gente en la calle, pero no tantos cofrades. ¿A qué se puede deber eso?
Estos dos años que ha habido de parón han generado un poco una desafección. Tenemos que adquirir un compromiso entre todas las hermandades, cofradías y esclavitudes para que el año que viene volvamos a estar a la altura. Es muy importante.
Que los recorridos de las cofradías hayan sido más cortos al no utilizarse la calle San Agustín ha conseguido que los espectadores que han estado en las procesiones hayan lucido como más. ¿Se plantean que, aunque esa vía volviese a estar operativa para realizar por allí los desfiles de Semana Santa, se mantengan unos trayectos más cortos para lograr unas procesiones más vistosas?
Ya varios cofrades nos han hecho llegar ese sentimiento. Habrá que valorarlo entre todos y ver los pros y los contras.
En la Procesión del Silencio parece que el recorrido se hace corto para tanta gente como asiste. ¿Barajan algún cambio como, por ejemplo, comenzar desde la parroquia de La Concepción?
Eso se planteó; lo que ocurre es que, al ser una procesión que organiza la Cofradía de la Misericordia, tiene su autonomía. Ya se les ha dicho que se podría valorar volver a salir de La Concepción, tal y como se hacía cuando estuvo cerrada la Catedral.
Insiste en las últimas fechas el Ayuntamiento de La Laguna en la declaración de la Semana Santa como Bien de Interés Cultural (BIC), pero lo que se había iniciado y estaba inconcluso eran los trámites para la declaración como Bien de Interés Turístico Regional. ¿O no es así?
Lo primero que se inició, desde cuando yo fui presidente en 2005, fue lo de Bien de Interés Turístico. Pero también es verdad que declarar BIC a la Semana Santa de La Laguna le va a dar más realce. Se ha promovido desde el Ayuntamiento y no nos parece mal, y más en una ciudad Patrimonio de la Humanidad. Aprovecho para agradecer al Consistorio su colaboración durante esta Semana Santa.
Me imagino que durante estos días de procesiones hay propuestas que le realizan cofrades, ideas que se le ocurren a la directiva de la Junta de Hermandades… ¿Tienen en mente algún proyecto en particular para el próximo año?
Vamos a estar abiertos a todas las sugerencias que nos lleguen desde todas las cofradías. Siempre lo ideal es el sumar y multiplicar. Tenemos que reconocer que ha habido algunos errores. Nos va a fortalecer admitir todas esas sugerencias de las hermandades para hacer una Semana Santa al nivel que se merece La Laguna.
