La Asociación de Vecinos Camino Real de La Villa ofrece en su sede social una exposición de antiguos enseres y fotografías históricas. Se trata de una mirada al ayer y a las costumbres locales en la que se descubren desde una cocinilla a un molinillo de café, pasando por un viejo lebrillo.

Parte de la riqueza de la exposición reside en otros artilugios menos usuales si cabe. Sobre unas mesas se encuentra una especie de antiguo soplete que se utilizaba para cortar el pelo a los cerdos o un dispensador de producto contra los insectos, explica el presidente de este colectivo vecinal, Roberto Marrero Carracedo, otrora presidente del Club Baloncesto Canarias y hoy entregado al asociacionismo vecinal.

Los recipientes que utilizaban las antiguas lecheras para transportar la leche o unas ruedas de carreta son otros de los elementos que incorpora este tributo al costumbrismo local. Todo ello en un barrio que, incluso en la actualidad, mantiene un estrecho vínculo con el mundo agrícola. «También hay fotos que han aportado vecinos y algunas pedidas al Ayuntamiento», señala el máximo responsable de esta entidad ciudadana, que se ha mostrado en los últimos años como una de las más activas del municipio.

La previsión de Marrero y su equipo era que la exposición se mantuviese abierta hasta el 31 de julio, pero la buena acogida que ha tenido los llevará a prolongarla algunas semanas más para permitir a todos los vecinos y amantes de la historia que puedan visitarla. Según detallan desde la Asociación de Vecinos, el horario de la muestra es el de apertura de la sede: de lunes a viernes, de 17:00 a 20:00 horas. Aunque Roberto Marrero, entusiasmado con la iniciativa, ofrece: «Si alguien quiere visitarla por la mañana, que me avise y le abro».

La Asociación de Vecinos resalta que en la instalación se cumple escrupulosamente con las medidas frente a la covid-19 en cuanto a aforo y uso del gel hidroalcohólico. Asimismo, y con el mismo objetivo, tienen una ruta señalizada sobre el suelo.