Es bastante probable que algún lector se cruzara hace más de 35 años con uno de los expedientes que ahora forman parte del fondo administrativo cuando «paseaba» por uno de los pasillos del Ayuntamiento de La Laguna. Las cajas se amontonaban en los accesos al que hoy se ha transformado en el Negociado de Hacienda. Sobra decir que entonces las medidas de seguridad no eran las más recomendables y que aquella «anarquía documental» requería de un método de trabajo centrado en el orden.
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Recuperación y clasificación.
Ese proceso duró varias décadas y cuando todo parecía estar más que atado se quiso dar una vuelta más a la organización con la digitalización de los archivos del fondo histórico y administrativo. Un trabajo de chinos que se pudo ejecutar gracias a un convenio cerrado con Telefónica.
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La digitalización.
Ya está solucionado un problema técnico que impedía acceder al fondo digital del Archivo de La Laguna para realizar consultas. Los documentos se ofertan en sus colores originales y el vínculo para llegar a estos es un enlace que existe en la web del Ayuntamiento (archivo.aytolalaguna.es).
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Sustitución de las cajas.
Lo recomendable es que las cajas en las que se depositan los documentos de papel sean sustituidas cada diez años. Ahora, precisamente, se está realizando uno de esos cambios. Los nuevos envoltorios tienen que tener unas características especiales para garantizar una buena conservación de los archivos: deben estar elaboradas con un cartón que contenga un Ph neutro, que sea antibacterias y antihongos.
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Contrato de externalización.
Las bases de un concurso para contratar un servicio de custodia externo de una parte del archivo administrativo ya están determinadas: en la actualidad un 10% del mismo está depositado en un recinto ubicado en el municipio de Güímar.
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La «nueva normalidad» educativa.
Antes de que la pandemia se hiciera fuerte, los viernes se organizaban visitas escolares al edificio localizado junto a la Plaza del Adelantado. La idea, si las condiciones sanitarias lo permiten, es retomar esas citas guiadas con el inicio del nuevo curso en septiembre.
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Abrir el archivo a la investigación.
Otro de los efectos de la crisis sanitaria fue el cese de las actividades de investigación en el Archivo de La Laguna por parte de alumnos y profesores de la Universidad de La Laguna (ULL). La digitalización de los documentos es un primer paso para recuperar esta colaboración institucional: otros de los vínculos que posibilita el refuerzo de la actual nómina de trabajadores –en el pico de mayor ocupación había un docena de personas desarrollando distintos cometidos en el Archivo– son los acuerdos puntuales que se cierran con el Servicio Canario de Empleo (SCE).
