El Ayuntamiento de La Laguna elabora, en colaboración con el Observatorio de la Inmigración en Tenerife, un argumentario para contrarrestar con argumentos mentiras, rumores y bulos de contenido racista, xenófobo o discriminatorio.
Se trata de una estrategia antirrumores específica para un municipio que concentra a los dos grandes centros de acogida temporal de inmigrantes de Tenerife, los de Las Raíces, con capacidad para unas 2.000 personas, y Las Canteras, para unas 1.600.
El concejal de Bienestar Social, Rubens Ascanio, y el director del Observatorio de la Inmigración en la isla, Vicente Zapata, han detallado en rueda de prensa los pormenores de esta iniciativa, que en una primera fase se centrará en identificar e inventariar los rumores más extendidos en el imaginario colectivo.
Se hará a través de una serie de entrevistas a personas representativas de diferentes colectivos y ámbitos, como centros educativos, ONG, centros de salud, Policía Local, asociaciones de diversa índole y los propios migrantes.
Esta fase ya está "muy avanzada" y se han realizado en torno a 60 encuestas, ha concretado Zapata, quien ha avanzado que los tópicos y falsas creencias más recurrentes "no sorprenderán a nadie".
La mayoría están relacionados con el destino de recursos sanitarios y sociales a la población inmigrante, a la que se ve como un factor de "competitividad" respecto a la población local.
El siguiente paso dentro de la planificación prevista en esta estrategia es la elaboración de un contraargumentario, "con datos fiables y objetivos", en un proceso que pretende ser participativo y colectivo.
No en vano, un grupo de voluntarios serán formados como "agentes antirumores", que harán las veces de prescriptores y cuya labor se prevé que tenga un "efecto multiplicador" entre la sociedad lagunera, que es mayoritariamente "acogedora y solidaria", ha anotado Rubens Ascanio.
Sucede que los discursos de odio se propagan con facilidad, bien a través de comentarios recurrentes o a través de las redes sociales, con mensajes reenviados una y otra vez que se extienden como la pólvora.
Precisamente es a través de las redes sociales y de otro tipo de acciones, como por ejemplo el reparto de folletos, cómo esta campaña pretende contrarrestar los rumores, bulos y falsas creencias en torno al fenómeno de la inmigración en una sociedad, la lagunera, que "es diversa" y lo será "cada vez más", ha indicado Ascanio.
Vicente Zapata también ha puesto el acento en el papel de los medios de comunicación y en la necesidad de extremar el rigor y contrarrestar informaciones relacionadas con el fenómeno migratorio.
El director del Observatorio de la Inmigración en Tenerife ha calculado que para septiembre pueda estar definida la estrategia antirrumores específica para La Laguna, que bebe de otras experiencias previas desarrolladas en Tenerife.
Zapata ha recalcado que, de todos modos, esta campaña "ya empezó" con la "reacción mayoritaria" de la sociedad lagunera, que se sumó al proceso de acogida de los inmigrantes que duermen en los campamentos y que por el día bajan hasta el casco de la ciudad para pasear o ganarse la vida vendiendo pulseras o plantas.
Existe, según cree Zapata, "un buen caldo de cultivo" para que la estrategia llegue a buen fin y que en La Laguna, ha apostillado Rubens Ascanio, "no se instalen murallas de odio y de xenofobia" alimentados por la "deficiente" gestión de la crisis migratoria por parte del Gobierno.
